La orden de aprehensión en contra del extitular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) en el sexenio pasado, Tomás Zerón de Lucio, seguirá vigente, luego de que un tribunal federal rechazó el amparo promovido por la defensa del exfuncionario.
De esta manera Zerón de Lució no librará las acusaciones en su contra por su presunta responsabilidad en los delitos de tortura y alteración de evidencias, derivados de la investigación por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ocurrida en septiembre de 2014.
Apenas el 27 de diciembre pasado, las autoridades dieron a conocer que el exfuncionario interpuso una queja ante el Poder Judicial de la Federación (PJF) en contra de la orden de aprehensión.
En octubre, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, aseguró que se ha reunido con Zerón de Lucio para tratar de aconsejarle que se entregue y coopere con las autoridades mexicanas.
No obstante, Encinas sólo ha recibido negativas, a pesar de los constantes reclamos de madres y padres de los estudiantes que piden se haga justicia con el encarcelamiento de Zerón de Lucio, pues aseguran que sabe el paradero de sus hijos.
Tomás Zerón estuvo presente en las indagatorias del Río San Juan en Guerrero, en donde presuntamente arrojaron los restos de los normalistas tras calcinarlos en el basurero de Cocula, luego de encontrarlos y tras las confesiones de Agustín García “El Chereje”, quien presuntamente recreó las condiciones de la muerte de los jóvenes.
Sin embargo, el exfuncionario aseveró que su presencia en el sitio fue apegada a derecho, aún cuando ni siquiera se avisó a los expertos argentinos que en ese momento analizaban el caso.
CEHR