Normalistas de Ayotzinapa derribaron las puertas de Palacio Nacional para hablar con el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre los avances en el caso de los 43 jóvenes desaparecidos en septiembre de 2014.
Durante su último día de protestas en la Ciudad de México, padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos realizarán un mitin para exigir una vez más justicia e información sobre el paradero de sus hijos.
Previó a esta manifestación, normalistas de Ayotzinapa llegaron a las puertas norte de Palacio Nacional, ubicadas en la calle Moneda para derribarlas. En un principio comenzaron a saltarse las vallas de protección para lanzar bombas de humo realizar pintas y romper vidrios con piedras y palos.
Ante su furia por la falta de diálogo con el Gobierno federal, los estudiantes de la Normal Isidro Burgos secuestraron una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la estrellaron contra la puerta de madera de Palacio Nacional.
Tras ser derribada, algunos padres y madres de familia de los 43 normalistas desaparecidos ingresaron al recinto donde se lleva a cabo la conferencia matutina del presidente.
Los estudiantes fueron frenados por los elementos de seguridad de Palacio Nacional, por lo que se dispersaron hacia el plantón instalado hace pocos días en el Zócalo de la Ciudad de México.
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