Dice que no debe quedar precedente

OEA condena asalto policial a la embajada

El secretario general de la organización, Luis Almagro, exhorta a México y a Ecuador a encontrar una solución pacífica; afirma que se debe respetar el derecho internacional

Sesión del Consejo Permanente de la OEA, ayer.
Sesión del Consejo Permanente de la OEA, ayer. Foto: www.oas.org

La irrupción violenta de la policía y militares ecuatorianos en la sede diplomática de México en Quito, para detener al exvicepresidente Jorge Glas, no debe sentar un precedente porque vulnera los principios fundamentales del derecho internacional universal, advirtió el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.

Al definir su postura en relación con los hechos ocurridos el viernes pasado en la embajada mexicana, afirmó que se debe respetar el derecho internacional, además de que las sedes diplomáticas son inviolables, y mucho menos justificar la intervención con leyes internas.

“No hay duda que las acciones emprendidas por las autoridades ecuatorianas contra la sede diplomática de México afectan gravemente los principios fundamentales del ordenamiento jurídico internacional, tan valiosos al sistema interamericano desde sus inicios: la inviolabilidad de las misiones diplomáticas, y la solución pacífica de las controversias”, resaltó.

Aseguró que la inviolabilidad de las misiones diplomáticas es norma consuetudinaria central en las relaciones entre estados desde tiempos inmemoriales.

“Nada justifica su violación; aceptarla es borrar de un plumazo la norma más elemental, sin la cual no hay relaciones diplomáticas posibles entre nuestros países”, dijo.

En la primera sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA convocada por Ecuador, Luis Almagro exhortó, tanto a este país como a México, para encontrar una solución pacífica a la ruptura de relaciones diplomáticas.

Advirtió que “no es el uso de la fuerza, la irrupción ilícita a una misión diplomática, ni la detención del asilado, la vía pacífica de solucionar esta situación. El capítulo quinto de nuestra carta constitutiva es determinante: ‘las controversias internacionales entre los Estados miembros deben ser sometidas a los procedimientos de solución pacífica señalados en esta carta’”, añadió.

Almagro llamó a los países miembros a no admitir que quede como precedente lo ocurrido en Quito este fin de semana.

“Debemos exigir que se retome la senda de la legalidad internacional en el pleno respeto a las normas que le son fundamentales y se restituya la situación a su estado anterior antes de abrir el camino para el recurso a las vías pacíficas de solución de las posibles controversias”, indicó.

Varias naciones como Bolivia, Argentina, Brasil, Canadá, Costa Rica, Panamá, Guatemala, Perú y Honduras condenaron la irrupción policial en la embajada mexicana, lo cual calificaron como un “precedente funesto”.

La embajadora panameña ante la OEA, Carmen Roquebert, puntualizó que “se puede estar de acuerdo o no con las interpretaciones que se le da a normativa internacional en otros países (...), pero es inaceptable justificar acciones que atentan contra los principios básicos de las reglas que rigen la convivencia pacífica”.

Benoni Belli, embajador de Brasil ante la OEA, declaró que “hay líneas rojas que no pueden cruzarse en las relaciones entre los Estados”.

El vicecanciller de Ecuador, Alejandro Dávalos, denunció que México “socava” el asilo y promueve “la impunidad” al haberlo concedido al “prófugo” Jorge Glas.