Partidos de oposición refrendaron su voto en contra del Plan B de la Reforma Electoral, porque buscan evitar el control de los procesos electorales y los caprichos del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
El dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, aseguró que la bancada de su partido en el Senado votará en contra del dictamen y señaló que el proyecto busca desde el poder, que el Presidente de la República y su partido, Morena, tomen el control de las elecciones y autoridades electorales “de manera descarada”.
“Es una locura esa reforma que quieren impulsar, no sólo lastima y viola el régimen democrático, trastocan fechas, trastocan un movimiento importante que es que no haya nadie que sancione a los servidores públicos que puedan andar haciendo campaña durante todo el tiempo… Hay que rechazarlo totalmente, no tiene nada bueno, no es nada bueno, no modifica nada que dé certeza, certidumbre”, dijo en entrevista.
Consideró que, aun con las modificaciones que antier se aprobaron en comisiones de la Cámara alta, la reforma a leyes secundarias en materia electoral “destruye la democracia”.
Morena insiste con su Plan B, con trampas y violando la Constitución, sólo para cumplir el capricho autoritario de Andrés Manuel López ObradorMarko Cortés, Líder nacional del PAN
El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, aseguró que Morena sólo busca cumplir con los caprichos del Presidente Andrés Manuel López Obrador, al insistir en aprobar el Plan B de la Reforma Electoral. “Morena insiste con su Plan B, con trampas y violando la Constitución, sólo para cumplir el capricho autoritario de Andrés Manuel López Obrador”, indicó.
El panista aseveró que siguen firmes y no permitirán venganzas ni que destruyan la democracia del país, además, agregó que el Instituto Nacional Electoral (INE) no se toca.
El representante del PRD ante el INE, Ángel Ávila, aseguró que el Gobierno federal quiere imponer una reforma como no se había visto en los últimos 30 años, debido a que no hay consenso con las demás fuerzas políticas.
“Hoy vemos al secretario de Gobernación en vez de dialogar con todas las fuerzas políticas, va al Senado y sólo se reúne con su partido. Desgraciadamente, el Presidente va a querer imponer su voluntad a un poder que debería ser autónomo y van a hacer una reforma que a todas luces es inconstitucional”, destacó.