El Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció ayer que México propondrá en el marco del panel de controversias del T-MEC, la creación de un grupo de especialistas mexicanos y estadounidenses para determinar si el consumo humano de maíz transgénico provoca o no daños a la salud.
“Qué bien que están impugnando un decreto para que no consumamos ese maíz, esto nos va permitir presentar propuestas en el panel (para solución de controversias), que será formar un grupo de investigadores para conocer a ciencia cierta si se trata de maíz transgénico, y si causa o no daño a la salud”, mencionó en la conferencia mañanera.
Estados Unidos pidió el jueves la conformación de un panel de solución de controversias, en el marco del acuerdo comercial con México y Canadá (T-MEC), luego del decreto presidencial mexicano para prohibir el uso y la importación de maíz genéticamente modificado para la masa y tortilla.
En ese sentido, AMLO precisó que nuestro país no viola el tratado comercial, porque ahí se establece que cuando hay diferencias entre los socios se puede acudir a los paneles; “es una buena oportunidad para revisar, no vamos a permitir que se utilice el maíz transgénico para la alimentación del pueblo de México, primero la salud”.
Aseguró que se acatará la resolución de quienes participen y decidan en el panel. “Vamos a estar de acuerdo, una vez resueltos los problemas y se desarrolle todo”.
Reiteró la importancia de este panel de controversias solicitado por el Gobierno de Estados Unidos porque no es un asunto sólo de México, sino que va a ayudar a los consumidores de esa nación como de todo el mundo.
“Lo que nosotros hicimos fue emitir un decreto para que no se use maíz amarillo, que nosotros consideramos transgénico en el consumo humano, que el maíz amarillo pueda utilizarse de forraje”, apuntó.
Finalmente, expuso que esta controversia se debe a las presiones de los grandes agricultores estadounidenses que están vinculados a diputados y senadores con mucha influencia en esa nación.