Este lunes, millones de estudiantes regresarán de forma presencial a las aulas, por lo que la Iglesia católica exhortó a todos los sectores a diseñar un pacto educativo nacional, “construido a través de obras y no de palabras o discursos”, como han pedido los obispos.
En su editorial, Desde la Fe solicitó que el debate en torno al regreso a clases no se reduzca a un “asunto político” ya que la prioridad deben ser los alumnos, en especial aquellos que no tienen las condiciones necesarias para volver a las escuelas.
De acuerdo con el Fondo de la Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, por sus siglas en inglés), al menos uno de cada tres niños en edad de ir a la escuela en América Latina no pudo acceder a la educación a distancia mientras las escuelas permanecieron cerradas.
la Iglesia católica reiteró su llamado a que en este regreso a clases haya una estrategia “integral” que disminuya al máximo los riesgos de contagios y que privilegie la salud de todos.
Explicó que la suspensión de clases presenciales en las escuelas del país por causa de la pandemia hizo que muchos estudiantes abandonaran el ciclo escolar debido a las desigualdades educativas preexistentes.
La Iglesia mencionó que el rezago educativo produce que las personas tengan menos probabilidades de acceder a una mejor calidad de vida, por lo que “despojar a los niños de esta oportunidad es condenar su futuro”.
Recordó que no debemos olvidar el riesgo que representa la tercera ola de contagios, ya que, de acuerdo con el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, hasta el 11 de agosto, en México se registraron 60 mil 928 casos positivos de COVID-19, con un incremento mayor de junio a agosto.
La Iglesia católica concluyó con las palabras del papa Francisco: “Es necesario un nuevo periodo de compromiso educativo, que involucre a todos los componentes de la sociedad. Escuchemos el grito de las nuevas generaciones, que manifiesta la necesidad y, al mismo tiempo, la oportunidad estimulante de un renovado camino educativo”.
KF
