D e 68 mil personas originarias de Centroamérica que se registraron desde 2019 en el Programa “Quédate en México”, el Gobierno de Estados Unidos inició el proceso de asilo para 16 mil; es decir, 23.5 por ciento.
En entrevista con La Razón, Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración (IMUMI) dijo que de acuerdo a cifras de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), de los 68 mil retornados a México, 52 mil se encuentran todavía esperando respuesta en México y algunos países como Honduras, Guatemala o El Salvador.
“El problema es saber ahora cuál es el siguiente paso para las personas que siguen esperando que inicie su procedimiento, porque con la cancelación deberían ya esperar en Estados Unidos y se les tiene que dejar pasar. No importa donde estén, tienen que esperar en ese país ya porque no tienen impedimento y están registrados”, destacó.
El Programa “Quédate en México”, firmado por el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, inició en enero de 2020, pero fue suspendido en enero de 2021 y cancelado por completo el 1 de junio pasado.
El objetivo fue que los solicitantes de asilo en la nación norteamericana esperaran en México mientras se resolvía su situación; sin embargo, dicho por las mismas autoridades de ese país, no funcionó y sólo se regresó a 68 mil personas a la zona fronteriza entre ambos países.
El documento de terminación del Departamento de Seguridad Interna (DHS) de Estados Unidos asegura que la intención del proyecto era que se adjudicaran más rápidamente las solicitudes de asilo y eliminara los retrasos. Sin embargo, la misiva admite que, en lugar de ayudar a eliminar los retrasos en el asilo, aumentaron.
Además, una cuarta parte de las personas inscritas en el programa volvieron a intentar ingresar a Estados Unidos. Otro de los problemas es que los tribunales de inmigración designados para escuchar los casos se cerraron por razones de salud pública entre marzo de 2020 y abril de 2021 por la pandemia originada por Covid-19, a pesar del gasto de millones de dólares.
Sin embargo, expertos en migración advirtieron que la cancelación del programa para connacionales y personas de Centroamérica que solicitan asilo en Estados Unidos no bajará las cifras de migración.
Ana Sainz, directora de Sin Fronteras ,aseguró que de ninguna forma la migración se va a detener, pues el programa no reducirá las cifras en el tema, sino que solamente abonará en dar un trato más humanitario.
“La migración no se puede detener, eso hay que tenerlo como premisa básica. Lo que si es que se gestiona el asilo de manera más humana, ya que lo que pasaba con ese programa era tener un costo humano, porque al regresarlos al país los secuestraban y había hacinamiento en las fronteras”, destacó.
Mientras que Celia Medrano, experta en migración de El Salvador, dijo a este diario que “aunque cierren ese programa, no se detiene la migración, ya que las causas del éxodo continúan en Centroamérica. Guatemala es un tercer país seguro y los mandan ahí, pero ante el retardo de soluciones las personas se iban a sus países y en unos meses volvían a intentar cruzar”.
