Las acciones para contener los flujos migrantes, entre las que se encuentran las recientes restricciones de Estados Unidos para limitar el asilo, así como el aumento en las detenciones de indocumentados por parte de México y los filtros que aplicó la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para evitar que los viajeros “usen a la dependencia como trampolín” provocaron una reducción de 41 por ciento en el número de solicitudes de enero a mayo de este año, en comparación con el mismo periodo de 2023.
De acuerdo con datos oficiales, en los primeros cinco meses de 2023 hubo 63 mil 436 peticiones, cifra que bajó a 36 mil 860 en 2024; y si comparamos este número con 2022 en igual periodo, el descenso es de 24 por ciento.
Organizaciones y albergues señalan que los migrantes comenzaron a abandonar los trámites de refugio en México por la tardanza de la Comar.
(Hemos visto) que desde octubre dejaron de dar documentos y sólo daban largas. Mejor la gente se está yendo para el norte del país y poniendo en riesgo sus vidas, pues se desesperan y abandonan los procesosBeatriz Fuentes<br>Albergue Casa Fuentes
Beatriz Fuentes, directora del albergue Casa Fuentes en la Ciudad de México, aseguró que esta situación fue detectada desde octubre del año pasado.
“(Hemos visto) que desde octubre dejaron de dar documentos y sólo daban largas; por ejemplo, tengo cien personas en el lugar y le llegan correos desde hace seis meses a sólo dos, en los que que les dicen qué sigue en su proceso su petición”, dijo.
La también activista alertó que la tardanza a las personas para que abandonen el trámite se reflejará en que la capital del país se va a llenar de campamentos y colonias irregulares, donde la constante llegada de migrantes será la principal característica, mientras que ninguna autoridad “hace algo” para terminar la problemática.
“Mejor la gente se está yendo para el norte del país y poniendo en riesgo sus vidas, pues se desesperan y abandonan los procesos, lo que en buena parte es factor para bajar los números en las peticiones de asilo este 2024. (Las autoridades) ya ni siquiera pueden garantizar su estancia en el país y la Comar sigue inhibiendo el proceso”, subrayó.
Fuentes agregó que por la falta de respuesta es que se ven sitios como la Plaza Giordano Bruno –recién desalojada-- o La Soledad en el Centro, donde incluso opera cerca una central de autobuses irregular hacia Chiapas, donde los trasladan de ida y vuelta sin ninguna restricción.
Según los datos consultados, Honduras encabeza la lista de peticiones de asilo a la Comar, seguida de Cuba, Haití, El Salvador, Venezuela, Guatemala, Colombia, Nicaragua, Ecuador, Chile y otras naciones. Además, de 12 mil 709 solicitudes revisadas en 2024, se han dado como positivas 9 mil 217.
Isabel Turcios, directora de la Casa del Migrante en Piedras Negras, Coahuila detalló que los testimonios de los migrantes que llegan a su albergue, es de cansancio, ya que se desesperan porque no hay una respuesta clara y hay mucha tardanza en una respuesta.
Es un proceso largo y por eso se desesperan; además nos dicen que si fuera fácil sacar algún trámite regulatorio en México tendrían más opción de quedarse, pero por el contrario, al ver que es muy tardado, se van a la fronteraIsabel Turcios<br>Casa del Migrante en Piedras Negras
“No es tan rápido, es un proceso largo y por eso se desesperan; además nos dicen que si fuera fácil sacar algún trámite regulatorio en México tendrían más opción de quedarse, pero por el contrario, al ver que es muy tardado, se van a la frontera y buscan jugársela para que les den asilo en EU, pues no tienen de otra”, detalló.
Destacó que, además, los nuevos procesos son más difíciles con preguntas más “duras” para saber si los migrantes realmente desean permanecer en México. A lo anterior, advirtió, la Comar sigue rebasada.
Advierte ONG “política del desalojo”
El Grupo de Monitoreo Frontera Centro advirtió que bajo la política del desalojo del Gobierno federal, esperan que paulatinamente comience el retiro de todos los campamentos de migrantes irregulares, para contener el fenómeno que se salió de control en la Ciudad de México.
Lo anterior, luego de que este jueves fue desalojado el campamento de haitianos y venezolanos que permanecía desde hace meses en la Plaza Giordano Bruno en la alcaldía Cuauhtémoc.
En la capital, existen otros lugares que concentran ilegales como Plaza Soledad en el Centro Histórico; Tláhuac; Iztapalapa, Azcapotzalco y Gustavo A. Madero donde se estima que hay, al menos, dos mil 500 personas en su conjunto.
En entrevista con La Razón, el investigador del grupo, Rodrigo Yedra, aseguró que el Instituto Nacional de Migración (INM) mantiene una política de “despojo”, que busca “limpiar” todos los espacios en donde hay migración irregular.
“Es una política de despojo y creemos desafortunadamente que el INM, junto a la Guardia Nacional, acudirán a otros espacios donde hay migrantes para comenzar su desalojo, principalmente en la noche, con lujo de violencia y presentando armas, lo que afecta a las infancias, trasladándolos a otros estados del país”, explicó.
Señaló que todas las personas que llegan a la CDMX, lo hacen porque requieren de protección especial, pues vienen huyendo por inseguridad y pobreza.
Además, muchos esperan su cita de CBP One para pedir asilo a Estados Unidos y por ello se quedan en la capital. Indicó que al momento las autoridades capitalinas no han logrado atender las necesidades de los migrantes, pues tampoco han podido crear albergues para mas de dos mil 500 personas que duermen en los campamentos.
