El Rey Zambada indicó que recibía apoyo de la Policía Federal para descargar droga del Cártel de Sinaloa en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), y destacó que en el 2001 participó de manera activa para ayudar a El Chapo Guzmán a fugarse del penal de Puente Grande, en Jalisco.
La fuga se ejecutó con un helicóptero que le hizo llegar para trasladarlo a la capital, en colaboración con un comandante de la Policía Federal y de la Agencia Federal de Investigación (AFI), de donde era titular Genaro García Luna.
Reynaldo Zambada indicó que la droga que llegaba al AICM era “transportada en pequeños jets privados procedentes de Venezuela”, así como otras aeronaves con capacidad para trasladar entre una y cinco toneladas de sustancias ilícitas. Los envíos eran según lo que el gobierno les permitía, por lo que hoy estarían señalando a otros países que participaban en el negocio de la droga.
Indicó que en un viaje comercial se llegaban a enviar entre 200 y 250 kilos de cocaína ocultos en maletas, las cuales eran marcadas para que policías federales las identificaran y posteriormente, en el mismo aeropuerto, las descargaran.
Se informó que fue en el periodo del 2000 al 2008 en el que El Rey habría recibió ayuda de la Policía Federal para descargar los cargamentos de droga en el AICM y que en la nómina de la organización criminal figuraban agentes de la AFI y de la Procuraduría General de la República (PGR).
El juez Brian Cogan aceptó la moción presentada por los abogados de García Luna para que se excluyera un testimonio que involucraba a Alexis Weinberg —un colaborador de negocios que le habría pagado un yate y una casa al exfuncionario mexicano—, pues indicó que no es información relevante para los delitos que se le imputan al acusado.