Foto Especial
Amparado, al igual que lo hizo el mes pasado uno de sus compañeros, este lunes se presentó ante un juez, el policía ministerial Saúl Antonio Sánchez Ortega, quien está acusado de permitir la fuga del homicida serial de mujeres César Armando Librado Legorreta, apodado El Coqueto, ocurrida hace dos meses.
Y sus declaraciones fueron similares a las que hiciera su compañero Rodrigo Israel Rodríguez. Ambos coincidieron al asegurar que el pasado 27 de febrero, día en que les encargaron custodiar a Librado Legorreta, se quedaron dormidos por el cansancio y ese momento fue aprovechado por el hombre que finalmente huyó.
Sánchez Ortega se presentó ayer de manera voluntaria, poco antes del mediodía, ante el Juez de Control de los Juzgados de Barrientos.
Sabía que al tener un amparo de la autoridad federal la Procuraduría de justicia mexiquense no podría detenerlo.
De acuerdo con las acusaciones del Ministerio Público, Saúl Antonio Sánchez Ortega formaba parte del grupo de tres agentes acusados de permitir “de manera dolosa” la fuga de Librado Legorreta, quien es señalado como el responsable de cuando menos siete homicidios de mujeres entre el 2010 y 2012.
Las autoridades ministeriales aseguraron que el delito de evasión, pasó de ser “culposo” a “doloso” porque los tres agentes en lugar de avisar lo que había pasado prefirieron huir.
Esto, según la Procuraduría, facilitó el escape de Librado Legorreta durante algunas horas. Y es que, según las indagatorias, el homicida serial huyó desde las 4:00 horas del 27 de febrero y aunque los agentes se enteraron alrededor de las 6:00 horas no lo reportaron, tiempo que aprovechó Librado para llegar a casa de su tía por medio de un automovilista que lo llevó.
El juez que lleva el caso fijó una nueva audiencia para este martes, en la cual determinará si inicia un proceso penal a Saúl Antonio Sánchez Ortega.
