Pablo Gómez, designado como titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), señaló que ésta no es agencia de ministerio público ni de investigación judicial, sino que se encarga de preservar al sistema financiero nacional.
“(La UIF) no es agencia de ministerio público, ni es tampoco una comisaría de policía; no es una agencia de investigación judicial, ni es una oficina burocrática para autorizar ciertas actividades”, señaló ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público en la Cámara de Diputados.
Gómez Álvarez acudió ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público en San Lázaro, para la ratificación del cargo en el que fue nombrado tras la renuncia de Santiago Nieto.
Expuso que México sufrió de un Estado que no veía la corrupción como algo incidental, sino como “uno de los pilares fundamentales de la gobernanza”.
Sin embargo, aseguró que con la llegada de este gobierno “una serie de instituciones, entre ellas la Unidad de Inteligencia Financiera cambió por completo. En lugar de ser parte de las estructuras de la corrupción se convirtió en uno de los instrumentos de combate a la corrupción”.
En tanto, Gómez Álvarez apuntó que no sólo corresponde al Gobierno combatir la corrupción, sino que también requiere una respuesta de las organizaciones civiles y el apoyo social.
Pablo Gómez reconoció que en la legislatura pasada no lograron resolver algunos asuntos pendientes en esta materia, sin embargo, consideró que la UIF tiene una legislación al nivel de las tareas que tiene encomendadas.
FGR