La organización internacional "Loss and Damage Collaboration", conformada por más de 100 investigadores y activistas, advirtió que anualmente cerca de 189 millones de personas de los países en desarrollo son afectadas por el clima extremo provocado por el cambio climático.
En su informe "El coste del retraso", señaló que debido a las condiciones extremas del cambio climático, entre 1991 y 2021 hubo más de 676 mil muertes, de las que el 79 por ciento de las defunciones se produjeron en los países pobres.
Además, la ONG explicó que las pérdidas económicas causadas por el cambio climático que han sufrido 55 de los países más vulnerables en los primeros veinte años de este siglo ascienden a 500 mil millones de dólares.
Sin embargo, destacó que las ganancias de las empresas de combustibles fósiles se han disparado, ya que entre el 2000 y 2019 la industria generó ganancias por arriba de los 30 billones de dólares, lo que representa que podía haber cubierto el coste de las pérdidas provocadas por la crisis climática, pero dejaron que las comunidades más pobres del mundo “paguen la cuenta”.
Aunado a esto, Loss and Damage Collaboration señaló que los países ricos son responsables del 92 por ciento del exceso de emisiones históricas que están vinculadas a un número creciente de desastres climáticos en los países pobres, por lo que son las naciones desarrolladas quienes deben pagar por las pérdidas y daños que han causado.
Al respecto, Lindsay Walsh, asesora de políticas en materia de clima de la organización Oxfam y coautora del informe, aseguró que la financiación para las "pérdidas y daños" causados por los efectos del cambio climático será un tema central en la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático, mejor conocida como COP27, que se celebrará en Egipto el próximo mes.
“Es una injusticia que los países contaminadores, que son desproporcionadamente responsables del aumento de los efectos climáticos devastadores, sigan cosechando megabeneficios, mientras dejan que los países vulnerables al cambio climático paguen la cuenta de sus repercusiones”Lindsay Walsh, asesora de políticas en materia de clima de Oxfam
DGM