Por orden del Papa Francisco, a partir de 2018, las tiendas y los negocios al interior del territorio del Estado Vaticano dejarán de vender cigarros a sus empleados, informó el portavoz de la Santa Sede, Greg Burke.
“El motivo es muy simple: la Santa Sede no puede cooperar con una práctica que perjudica claramente la salud de las personas”, explicó en una declaración oficial.
Francisco agregó que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año el tabaco es la causa de más de 7 millones de muertes en el mundo.
“A pesar de que los cigarros vendidos, a precio descontado, a los empleados y pensionistas del Vaticano sean una fuente de ingresos para la Santa Sede, ningún beneficio puede ser legítimo si pone en peligro la vida de las personas”
Papa Francisco
En declaración oficial
Adiós a la vieja costumbre
Hasta ahora era una costumbre entre los trabajadores vaticanos comprar cartones de cigarros de varias marcas del mundo tanto en el supermercado de la Santa Sede, conocido como la Annona, como en otros puntos de venta ubicados al interior de los Jardines Vaticanos.
Uno de los beneficios para los cardenales de la Curia Romana es el derecho a una cantidad fija de cartones de cigarros
Aunque sólo los empleados con credenciales oficiales tienen acceso a esos negocios, es por todos conocidos que muchos de ellos adquirían los cigarros para terceras personas fuera de la Santa Sede aprovechando el conveniente precio libre de impuestos.
Incluso, entre las políticas internas del Vaticano está considerado que uno de los beneficios para los cardenales que prestan servicio en la Curia Romana es el derecho a una cantidad fija de cartones de cigarrillos.
Te puede interesar:
Invita el Papa Francisco a reos a comer; 2 se fugan
ag