Un inflador defectuoso de bolsa de aire de la marca Takata en un automóvil Honda provocó otra muerte, informó la automotriz.
Este martes indicó que con este deceso suman 20 las víctimas mortales por el artículo que puede estallar con fuerza excesiva y lanzar esquirlas a los conductores o pasajeros del vehículo en cuestión; el último caso se registró en una comunidad de Baton Rouge en un auto modelo 2004.
Funcionarios de la empresa automotriz y de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) realizaron una inspección al vehículo y confirmaron que la explosión del inflador fue la causa del deceso, informó el portavoz de Honda, Marcos Frommer.
De acuerdo con Honda, se enteró recientemente del deceso ocurrido el pasado mes de julio y detalló que tras la revisión de una de las unidades defectuosos se determinó que por las altas temperaturas y humedad, la sustancia puede arder demasiado rápido, haciendo estallar el envase de metal que lo contiene.
El problema ha generado el llamado a reparación más grande en la historia de Estados Unidos —con 42 millones de vehículos y hasta 69 millones de infladores involucrados—, y ha obligado a la compañía japonesa Takata a presentar una protección contra bancarrota.
Asimismo, informó que desde que se detectó el problema se llamó a los conductores de estos vehículos a acudir a una revisión, sin embargo este último accidente ocurrió debido a que la bolsa de aire fue usada como refacción en otro auto, un Civic 2002.
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