La posible presencia de indigentes y mendigos en las inmediaciones del lugar donde se celebrará la boda del Príncipe Harry y Meghan Markle desató una controversia por quienes piden “limpiar” las calles de la ciudad de Windsor, Inglaterra.
A cuatro meses de que se lleve a cabo el enlace matrimonial, el líder del ayuntamiento, Simon Dudley, sugirió atender la “epidemia” de indigencia en la zona, hecho que le generó críticas por su desprecio a la población que no tiene hogar.
Algunas personas consideraron la declaración como un hecho “repugnante” y detallaron que las personas que viven en la calle no lo hacen por elección sino porque no tienen otro lugar.
El comentario del político conservador generó respuestas por parte de organizaciones que ofrecen apoyo a personas sin casa, quienes pidieron no estigmatizar a los llamados indigentes, quienes en esta época invernal sufren por el clima.
[caption id="attachment_683495" align="alignleft" width="696"] Indigente se resguarda en época de frío (Foto: AP)[/caption]
El funcionario expresó a través de su cuenta de Twitter la idea de “limpiar” las calles para evitar que vagos se acerquen al castillo, una de las residencias favoritas de la reina Isabel II.
Su tuit lo dedicó a la policía y a la primera ministra, Theresa May, para evitar que este fenómeno afecte la ceremonia del próximo 19 de mayo, ya que considera que da mala imagen a la región.
Al respecto, May aseveró que es necesario atender el problema pero no para quitarlos de las calles “porque dan mala imagen”, sino para ayudarlos a sobreponerse a las condiciones en las que viven.
srv