El FBI registró ayer la oficina de Michael Cohen, abogado personal del presidente de Donald Trump y decomisó documentos privilegiados relacionados con distintos asuntos, entre ellos los pagos a Stephanie Clifford, la actriz porno Stormy Daniels.
Según The New York Times, el FBI incautó correos electrónicos, documentos tributarios y registros comerciales.
En una conferencia de prensa Trump acusó cacería de brujas y dijo que era lamentable que los agentes federales “entraran por la fuerza” a la oficina de su abogado personal. También dijo que la investigación del fiscal especial Robert Mueller es “un ataque contra nuestro país”.
“Es una situación deshonrosa, es una cacería de brujas total”, lamentó el mandatario en su primera reacción a la sorpresiva incursión policial en las oficinas de Cohen en la Torre Trump, ordenada por un juez federal de Nueva York a pedido de Mueller.
El Dato: Cohen pagó 130 mil dólares a Stormy Daniels para guardar silencio sobre una presunta relación sexual con Trump en 2006.
El mandatario expresó su malestar por la pesquisa iniciada hace un año sobre la supuesta actividad rusa, y por la decisión del procurador general Jeff Sessions de recusarse.
La fiscalía federal de Manhattan estuvo a cargo del operativo y estuvo basado, en una recomendación de Mueller, según el abogado de Cohen, Stephen Ryan.
“La decisión de la fiscalía federal en Nueva York de conducir sus investigaciones mediante el uso de órdenes de cateo es completamente inapropiada e innecesaria”, dijo Ryan en un comunicado.
“Resultó en el decomiso innecesario de comunicaciones confidenciales entre un abogado y sus clientes”, señaló.
Mueller investiga los presuntos nexos entre Rusia y la campaña de Trump, además de indagar si las acciones del presidente representan obstrucción de la justicia.
Rusia ha negado las acusaciones de intervención en la elección en las elecciones de 2016 en Estados Unidos, al tiempo que Trump y la Casa Blanca han dicho reiteradamente que no hubo una colusión.
Ryan dijo en su declaración que Cohen ha cooperado con las autoridades y entregó miles de documentos a los investigadores del Congreso en su propia investigación sobre los supuestos intentos de Moscú de in¢uir en las elecciones presidenciales.
Por reglas del Departamento de Justicia, Mueller está obligado a consultar con el subsecretario de Justicia Rod Rosenstein, cada vez que su equipo descubra nuevas evidencias que no encajen dentro de sus obligaciones originales. Posteriormente, Rosenstein determinará si permite a Mueller proceder o asignar el asunto a otra fiscalía federal u otro sector del Departamento de Justicia.