La música de los tragamonedas se escuchaba en la sala mientras los policías cruzaban metódicamente el casino con las armas listas. Pero la actividad usual de Las Vegas proseguía inmutable y los jugadores seguían tirando de las palancas, aparentemente sin saber que apenas unos pisos arriba un hombre estaba disparando contra un concierto al aire libre, en la peor masacre en la historia moderna de Estados Unidos.
"¡Hay un hombre disparando! ¡Ya ha matado a muchas personas!”, grita un policía mientras pasa entre la gente, a la caza del hombre que mató a 58 personas desde su suite en el hotel.
Los agentes ascienden cuidadosamente hasta el piso 32 del hotel-casino Mandalay Bay. Al acercarse a la suite desde una escalera, otro policía grita: "¡Abajo la puerta!" antes de escucharse una fuerte explosión y la alarma de incendios.
Adentro encuentran a Stephen Paddock yaciendo en un charco de su propia sangre, con fusiles por toda la habitación. Un agente retira un fusil de alto poder de una ventana y otros descubren un arsenal, cámaras en las mirillas, una máscara antigás casera e incluso un vibrador.
Pero más de siete meses después de la masacre del 1 de octubre, la policía no tiene respuesta a la pregunta clave en la investigación: ¿Qué llevó a ese contador retirado y jugador de azar a desatar esa lluvia de balas?
El miércoles, la policía dio a conocer varias horas de video tomado por las cámaras corporales de dos agentes que participaron en la operación, en respuesta a una demanda legal de la agencia Associated Press y otras organizaciones de prensa.
Los videos muestran a los agentes dentro de la habitación de Paddock y uno toma un fusil automático del borde de una ventana. El cadáver de Paddock es visto en el trasfondo, con pantalones oscuros y una camisa de mangas largas y un guante en la mano izquierda. Un charco de sangre se ve en la alfombra junto a su cabeza, mientras un agente de SWAT pasa junto al cuerpo.
Los agentes notan el volumen del arsenal de Paddock, más de 10 fusiles de alto poder. Otros hablan sobre cómo Paddock disparó desde la ventana y apuntan a “una maleta llena de cargadores de AK”.
Los investigadores piensan que el hombre de 64 años actuó por su cuenta y se suicidó antes de que los agentes irrumpieran en su suite.
El video dado a conocer el miércoles, que totaliza dos horas y media, representa una muestra de centenares de grabaciones por las cámaras corporales y no provee una imagen completa de todo lo que vio la policía cuando entró a la suite de Paddock.
El video no muestra lo que vio el primer agente que entró porque él no activó su cámara.
La revelación de que el agente no encendió su cámara generó cuestionamientos sobre si los policías siguieron el protocolo del departamento, que requiere que los agentes con cámaras corporales las activen durante llamadas que llevan a interacción con residentes y allanamientos.
La policía se negó a decir si el agente será sancionado.
cms