“No me reconoció”, lamentaba la madre de Ederson, de tres años, tras el encuentro con su hijo en un albergue de Phoenix. Según la historia relatada por The New York Times, la joven migrante de 31 años estuvo cuatro meses sin ver a su pequeño: fue retenida por la patrulla fronteriza y separada de él hace cuatro meses. Ahora se topa con la indiferencia de su hijo. Del otro lado de la sala Darly, una niña de tres años pedía a gritos que la llevaran con la persona que la cuidó, mientras estuvo separada de sus familiares, reseña el diario estadounidense.
El trauma que la aplicación de la política de tolerancia cero de Donald Trump ha dejado en los niños es permanente. Según la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales de EU, la reparación de los daños provocados por el distanciamiento no se puede arreglar. “El deterioro de su desarrollo físico y mental puede provocar enfermedades como ansiedad o depresión”, alertaron defensorías de México, Colombia, Ecuador, Honduras y Guatemala.
“Si se confirma que 57 niños han sido devueltos a sus padres gracias a nuestra demanda, no podríamos estar más contentos por esas familias. Pero que no quepa ninguna duda: el gobierno no cumplió con el plazo”
Lee Gelernt
Abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles
Sin embargo, el gobierno estadounidense presumió ayer que todos los niños menores de 5 años, separados de sus familias, como resultado de la política migratoria de tolerancia cero, habían sido reunidos con sus padres. Pero inmediatamente reconoció que la mitad de los pequeños siguen a cargo del Estado por razones de seguridad, la deportación de sus padres y otros problemas.
Hasta ayer, 57 de los 103 niños estaban reunidos con sus padres, informaron funcionarios del gobierno. “A lo largo del proceso de reunificación, nuestro objetivo ha sido el bienestar de los niños y devolverlos a un ambiente sano”, de acuerdo con un comunicado de los titulares de los tres organismos a cargo del proceso.
“Desde luego, resta una enorme cantidad de trabajo arduo y obstáculos similares que enfrentan nuestros equipos al reunir a las familias restantes. El gobierno de Trump no afronta esta misión con ligereza”, se lee en el documento oficial.
“A lo largo del proceso de reunificación, nuestro objetivo ha sido el bienestar de los niños y devolverlos a un ambiente sano. Desde luego, resta una enorme cantidad de trabajo arduo”
Gobierno de Estados Unidos
En un informe
Los funcionarios explicaron que 46 pequeños no podían ser reunificados: una docena de ellos fueron deportados y el gobierno busca la manera de entrar en contacto con ellos; nueve están presos por la policía judicial por otros delitos y se desconoce el paradero de un adulto.
En cuanto a los padres deportados, las autoridades argumentaron que habían decidido abandonar a sus hijos. Un padre deportado, sin embargo, declaró a Los Angeles Times que no sabía que estaba renunciando a estar con su hijo cuando firmó el oficio. En esos 22 casos “no devolveremos a los niños con sus padres, debido a la gravedad de los delitos”, dijo Matthew Albence, del Servicio de Inmigración y Aduanas.