La cadena informativa CNN presentó este martes una demanda contra el presidente estadounidense Donald Trump y varios de sus asistentes, luego que el mandatario le retiró la credencial a su corresponsal en la Casa Blanca, tras una confrontación entre ambos la semana pasada.
En su demanda, presentada la mañana de este martes en una corte federal de distrito en Washington, CNN busca que la Casa Blanca restablezca esa credencial para el periodista Jim Acosta, conocida coloquialmente como "pase duro" (hard pass).
Además de Trump, la demanda incluye al jefe de Gabinete de la Casa Blanca, John Kelly; la jefa de prensa, Sarah Sanders; el subjefe de comunicaciones, Bill Shine; el director del Servicio Secreto, y el agente de la misma policía que quitó la credencial a Acosta el miércoles pasado.
El retiro de la credencial tuvo lugar unas horas después que Acosta y Trump escenificaron un enfrentamiento verbal en el curso de una conferencia de prensa en la Casa Blanca, durante la cual el periodista trató de hacer más preguntas al mandatario, ante al malestar del gobernante.
Durante el intercambio, registrado en vivo por las cámaras de televisión, Trump se retiró molesto por unos segundos del atril desde el que respondía a las preguntas, mientras Acosta trataba de cuestionarlo sobre la investigación por posible colusión entre su campaña y Rusia, tras lo cual el presidente lo llamó una "persona terrible".
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA) respaldó en un comunicado la demanda para restablecer la credencial a Acosta, quien sin ella, no puede ingresar a la Casa Blanca para hacer su trabajo.
“Revocar el acceso a las instalaciones de la Casa Blanca equivale a una desproporcionada reacción a los eventos del pasado miércoles. Continuamos urgiendo a la administración a cambiar curso y reinstalar de manera plena al corresponsal de CNN”, apuntó la WHCA.
El presidente de la WHCA, Oliver Knox, aseveró que el presidente de Estados Unidos “no debería estar en el negocio de seleccionar de manera arbitraria a los hombres y las mujeres que lo cubren” informativamente.
Trump pareció sugerir la semana pasada que además de Acosta, con quien ha mantenido una abierta confrontación casi desde su arribo a la Casa Blanca, otros periodistas también podrían perder sus credenciales por no dar el trato respetuoso que la Presidencia y la Casa Blanca merecen.
A diferencia de las credenciales que expiden a periodistas otras instituciones de gobierno y el Congreso, la de la Casa Blanca es expedida por el Servicio Secreto, tras una investigación, que en algunos casos puede tomar meses, y les otorga un acceso sin las restricciones que impone a otros visitantes.
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