El candidato de oposición, Ekrem Imamoglu, del Partido Popular Republicano (CHP, por sus siglas en turco), ganó por segunda ocasión la votación este domingo 23 de junio, por la candidatura para la alcaldía de Estambul.
Según datos iniciales que contemplan el 96 por ciento de los votos, la agencia de noticias estatales Anadolu Agency informa que Imamoglu cuenta con el 53.86 por ciento de los sufragios, mientras que su contrincante el primer ministro Binali Yildirim, del Partido de Justicia y Desarrollo (AKP, por sus siglas en turco), obtuvo el 45.23 por ciento.
Los resultados representan un golpe para el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan y el partido gobernante (AKP). Ya que en marzo se pidió rehacer la votación entre los candidatos, después de que las autoridades cancelaron los primeros resultados que también favorecían a Imamoglu, debido a que el Presidente afirmó que se produjo fraude y corrupción.
En esta primera ronda Imamoglu contó con el 48.8 por ciento del apoyo, en comparación con Yildirim que obtuvo el 48.5 por ciento, una diferencia de 13,000 votos. Cuando el presidente Erdogan acudió a emitir su sufragio estas segundas elecciones, dijo que esperaba que los votantes tomarán la mejor decisión para Estambul.
Binali Yildirim ha admitido la derrota de este domingo después de que se anunciaron los primeros resultados, ante la victoria del candidato opositor declaró que “lo felicitó y le deseo éxito”.
Por su parte, Imamoglu dijo que este triunfo genera “un nuevo comienzo” para el país, y agregó que no venció “un solo grupo o partido, sino el conjunto de Estambul y Turquía, los que ganaron estas elecciones”.
El integrante del partido de oposición también mencionó que se encontraba listo para trabajar con el presidente Erdogan y resolver los conflictos a los que se enfrenta el país.
El acontecimiento sucede en un escenario delicado, pues el presidente Erdogan planea reparar la economía turca, después de que a mediados del año pasado se detuvo, en gran parte por la deuda extranjera que llevó al país a tener un periodo de recesión en invierno, la lira turca cayó bruscamente y presentó un aumento en la inflación. En búsqueda de una solución Erdogan planea reunirse con el presidente Donald Trump, para resolver los enfrentamientos diplomáticos con Estados Unidos.
Después de un golpe militar fallido en el año 2016 se han presentado quejas de represión contra grupos de derecho, sociedad civil, empresarios, periodistas y activistas opositores. Ello ha ocasionado resentimiento para el gobierno de Erdogan por parte de los habitantes turcos.
La victoria empuja al político opositor, Ekrem Imamoglu, a uno de los escaños más poderosos en Turquía.
El presunto candidato vencedor pidió que no se dejen “las urnas hasta que se finalicen los informes oficiales que procesan esta responsabilidad histórica”.
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