Manifestantes, entre ellos japoneses-estadounidenses que fueron detenidos cuando eran niños por el gobierno de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, denunciaron los planes del presidente Donald Trump de albergar a niños migrantes en una base militar en Oklahoma.
En un parque cerca de la base Fort Sill, los inconformes colgaron grullas de papel que según los organizadores fueron hechas por personas de todo el país. Los oradores lamentaron la aprehensión de los japoneses-estadounidenses durante la guerra y hablaron en contra de detener a los solicitantes de asilo y a los inmigrantes.
El gobierno federal detuvo a cientos de japoneses y japoneses-estadounidenses en Fort Sill en el conflicto con Japón. La Oficina de Reasentamiento de Refugiados anunció recientemente sus planes de albergar temporalmente hasta 1.400 menores en la base, que se encuentra cerca de Lawton. Fort Sill también albergó a niños migrantes en 2014 durante el gobierno de Barack Obama.
Antes de la protesta, unas dos docenas de personas se reunieron en la base para una conferencia de prensa. Un hombre con uniforme militar les dijo que se fueran, pero se quedaron y concluyeron la conferencia antes de dirigirse al parque.
Niños sin acompañante han estado llegando a la frontera sur de Estados Unidos en cifras récord, en gran medida desde Guatemala, Honduras y El Salvador. En mayo, agentes fronterizos aprehendieron a 11.507 menores que viajaban solos.
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