Tras la victoria de Evo Morales, avalada por el Tribunal Electoral, como presidente de Bolivia para el periodo 2020-2025, el opositor Carlos Mesa Gisbert aseguró que no reconocerá ese triunfo, opinión que también sustenta la Organización de Estados Americanos (OEA).
Carlos Mesa afirmó que lo hecho por Evo Morales era ya esperado; empezó con la suspensión de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), desde el día de la elección el pasado domingo 20 de octubre, “el fraude se está consumando, hay irregularidades sin límite, lo ha dicho también la Unión Europea”.
Mesa Gisbert añadió que “lo que nosotros queremos ratificar es no reconocer esos resultados, lo que sigue es mantener en pie las movilizaciones en los nueve departamentos de manera pacífica y continuará hasta que haya una segunda vuelta”.
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Agregó que cualquier resultado que dé por ganador a Evo Morales en primera vuelta es producto de un fraude, por lo que es necesario estar atentos "para que no entre en el camino de la dictadura al que quiere llevarnos el presidente Morales".
“Hay crisis política provocada por el gobierno y el presidente Morales, se ha generado este clima por su decisión de alterar los resultados electorales y negarse a participar en una segunda vuelta. Controla de manera arbitraria y discrecional a las Fuerzas Armadas, está dando el salto de un gobierno democrático a uno dictatorial, por eso la respuesta es la movilización popular pacífica, no violenta ante la confrontación y generación de conflictos”.
Indicó que mediante la Coordinadora de Defensa de la Democracia que incorpora al conjunto de partidos políticos de oposición, a los comités cívicos de los nueve departamentos del país, a una organización preexistente, que se llama Consejo Nacional de Defensa de la Democracia, y a todas las organizaciones democráticas y personalidades que quieran sumarse a esta decisión, se continuará en defensa del voto de los bolivianos.
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