Las estrictas medidas de bloqueo a personas y negocios, para combatir la propagación del coronavirus en Gran Bretaña, podrían durar no semanas, sino meses y cuando éstas tengan qué levantarse, lo harán con la mayor cautela, de manera gradual, según las disposiciones del primer ministro Boris Johnson, quien cayó en cama, infectado por Covid-19, el viernes.
Reino Unido reportó 19 mil 522 casos confirmados de la enfermedad y mil 228 muertes, ayer después de un aumento de 209 decesos el pasado sábado, en comparación con la medición anterior, según su Ministerio de Salud.
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“Lo importante es que éste es un objetivo en movimiento. Si lo hacemos bien: que la enfermedad avance y baje y si gestionamos toda nuestra atención a través de todos nuestros sistemas de salud y atención de manera sensata y controlada, esto irá mejor”, declaró ayer la subdirectora médica del Ministerio de Salud, Jenny Harries, en conferencia.
“Esto no quiere decir que estaríamos completamente encerrados durante seis meses, pero significa que, como nación, tenemos que ser muy, muy responsables y seguir haciendo lo que todos estamos haciendo hasta que estemos seguros de que podemos comenzar a levantar gradualmente varias intervenciones”, agregó la funcionaria.
"Instamos a todos los sectores del país a ponerse en pie de emergencia. Éste es un paso sin precedentes en tiempos de paz”
Robert Jenrick
Ministro de Vienda
Su advertencia se produjo cuando el primer ministro envió un mensaje por escrito a 30 millones de hogares en Gran Bretaña, para instarlos a cumplir al pie de la letra las estrictas normas, y de esta forma evitar que el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés), financiado con fondos públicos, se vea abrumado por un aumento en los casos.
“Sabemos que las cosas empeorarán antes de que mejoren. En este momento de emergencia nacional, les insto, por favor, que se queden en casa, protejan el NHS y salven vidas”, se lee en la carta nacional de Johnson, quien se encuentra en aislamiento por contagio.
Horas después de que el primer ministro Boris Johnson revelara que había dado positivo a la prueba de coronavirus, su ministro de Salud, Matt Hancock, también cayó en cama con síntomas de la enfermedad, lo mismo ocurrió con el principal médico de GB, Chris Whitty .
La cantidad de pruebas de detección que se llevan a cabo en toda Gran Bretaña alcanzó las 10 mil por día, según el ministro de Gabinete de Johnson, Michael Gove, mientras las autoridades sanitarias tratan de adquirir más ventiladores, necesarios para los hospitales que tratan a pacientes con Covid-19.
Gran Bretaña ha emitido una orden para hacer que miles de estos dispositivos faltantes sean fabricados por las grandes armadoras de autos y aviones, como Ford, Airbus y Rolls-Royce.
La última vez que se apeló al apoyo de la industria fue durante la contingencia que provocó la Segunda Guerra Mundial en Gran Bretaña. El ministro de Vivienda de Johnson, Robert Jenrick, instó la semana pasada a todos los sectores económicos del país a ponerse en “pie de emergencia”.
“Éste es un paso sin precedentes en tiempos de paz”, dijo Jenrick.