El Gobierno de Ecuador amplió por 60 días la vigencia del estado de excepción para contener la propagación del coronavirus y reconoció que la demanda de camas en los hospitales públicos en la capital, Quito, aumentó en la última semana por un mayor número de contagios de COVID-19.
El presidente Lenín Moreno ha dicho que la pandemia está siendo controlada luego de mitigar uno de los peores brotes de la región en Guayaquil entre marzo y abril, pero este mes se ha registrado un aumento de casos en otras ciudades del país.
El ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, dijo que existe un porcentaje alto en la demanda de camas en hospitalización y las unidades de cuidados intensivos en la red de salud pública en Quito, pero que la situación estaba controlada en la ciudad.
“Es un hecho que los contagios aumentaron hace tres o cuatro semanas y ahora el reflejo de ese contagio es lo que tenemos en términos de la demanda de camas en cuidados intensivos”, explicó Zevallos a un canal de televisión, al señalar que en Quito “no hemos llegado a las cifras de Guayaquil”.
Zevallos añadió que el Gobierno está ampliando el número de camas y del personal médico en la capital
Con información de Reuters