El Programa Mundial de Alimentos (PMA) advirtió este lunes que las repercusiones socioeconómicas de la pandemia de coronavirus serán "devastadoras" y podrían desencadenar la escasez de alimentos para millones de residentes de países de ingresos bajos y medianos.
En las naciones en los que opera el PMA, se estima que el número de personas que padecen hambre aumente en más de 80 por ciento para fines de 2020, en comparación con los años previos al coronavirus. América Latina y África se encuentran entre las áreas más afectadas, de acuerdo con las proyecciones.
La agencia adscrita a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aseguró que frente a esta situación, sus trabajadores ya se embarcaron en "la mayor respuesta humanitaria de su historia" para mitigar el impacto de la crisis.
“Esta crisis sin precedentes requiere una respuesta sin precedentes. Si no respondemos de manera rápida y efectiva a esta amenaza viral, el resultado se medirá en una pérdida de vida desmesurada y los esfuerzos para revertir la ola de hambre se perderán", dijo el director del PMA, David Beasley, en un comunicado.
"La primera línea en la batalla contra el coronavirus está cambiando del mundo rico al pobre", dijo Beasley. "Hasta el día que tengamos una vacuna médica, la comida es la mejor vacuna contra el caos".
Mientras que el PMA dijo que ayudó a 97 millones de personas el año pasado, planea ayudar a casi 140 millones este año. Pidió a los donantes que aporten para lograr la meta de los 4.9 mil millones durante los próximos seis meses.
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