Los astronautas estadounidenses Bob Behnken y Doug Hurley, que fueron enviados a la Estación Espacial Internacional en la nueva cápsula Crew Dragon de SpaceX, amerizaron el domingo en aguas del Golfo de México al final de la primera misión tripulada de la NASA en nueve años.
Behnken y Hurley despegaron de la estación orbital el sábado y regresaron a Tierra, frente a las costas de Pensacola en Florida, a las 14.28 hora local, después de viajar por 21 horas a bordo de la cápsula "Endeavor".
El amerizaje exitoso era la última gran prueba a la nave espacial de la firma de Elon Musk para el transporte de astronautas desde y hacia la Estación Espacial Internacional.
"En representación de los equipos de la NASA y de SpaceX, les damos la bienvenida en su vuelta al planeta Tierra. Gracias por volar con SpaceX", dijo la misión de control de la compañía al final del viaje.
Para la operación del retorno, los propulsores a bordo y dos juegos de paracaídas trabajaron simultáneamente a fin de desacelerar el viaje de la cápsula, permitiendo el reingreso a la atmósfera de los astronautas en la nave aproximándose a una velocidad de hasta 25.000 kilómetros por hora. El impacto del amerizaje fue calculado en unos 24 kilómetros por hora.
Los dos astronautas pasarán una hora flotando dentro de la cápsula hasta ser recogidos por los equipos de SpaceX y de la NASA desde un helicóptero. Serán sometidos a chequeos médicos en su ruta hacia el Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston, Texas.
Musk, un empresario multimillonario, convirtió a SpaceX en la primera empresa privada en enviar humanos a órbita con el vuelo de Behnken y Hurley, que pasaron más de dos meses en la Estación Espacial Internacional.
Fue la primera vez en que la agencia espacial estadounidense envió humanos al espacio desde el retiro de su programa de transbordadores en 2011. Desde entonces, Estados Unidos ha confiado en el programa espacial de Rusia para mandar a sus astronautas a la estación espacial.
KA