El gobierno de Rusia aseguró que todos los voluntarios que recibieron la vacuna experimental contra el COVID-19 que desarrollan el Ministerio de Defensa ruso y el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya presentaron inmunidad.
"Los resultados de las revisiones han demostrado con claridad la existencia de una evidente respuesta inmunológica obtenida como producto de la vacunación (...) no se ha detectado ningún efecto secundario o desviación en el funcionamiento del organismo de los voluntarios", informó el Ministerio de Defensa, citado por la agencia RT.
Debido a ello, las autoridades tienen como objetivo lanzar la producción en masa de una vacuna contra el coronavirus el próximo mes y producir "varios millones" de dosis por mes para el próximo año.
"Contamos con comenzar la producción en masa en septiembre", dijo el ministro de industria, Denis Manturov, en una entrevista publicada por la agencia de noticias TASS.
Podremos asegurar volúmenes de producción de varios cientos de miles por mes, con un eventual aumento de varios millones a principios del próximo año, dijo.
El funcionario agregó que un desarrollador está preparando tecnología de producción en tres ubicaciones en el centro de Rusia.
Sin embargo, aunque las autoridades rusas aseguran que llevan la delantera, de acuerdo con los registros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el prototipo de Gamaleya no es uno de los seis que se encuentran en Fase 3.
La vacuna de Gamaleya es una vacuna llamada vector viral, lo que significa que emplea otro virus para transportar el ADN que codifica la respuesta inmune necesaria en las células.
ntb