La farmacéutica estadounidense Eli Lilly and Company dijo el martes que la prueba clínica patrocinada por el gobierno de un tratamiento de anticuerpos COVID-19 ha sido detenida debido a una preocupación de seguridad.
"Por precaución, la junta independiente de monitorización de seguridad de datos (DSMB) de ACTIV-3 ha recomendado una pausa en la inscripción", dijo la portavoz Molly McCully en una declaración por correo electrónico. "Lilly apoya la decisión de la DSMB de garantizar la seguridad de los pacientes que participan en este estudio".
Las acciones de Lilly bajaban alrededor de un 3 por ciento a 150 dólares. (Reporte de Michael Erman en Nueva York Editado en español por Javier López de Lérida)
De manera previa, la farmacéutica Eli Lilly and Company le pidió al gobierno de Estados Unidos que permita el uso de emergencia de uno de sus fármacos para una terapia experimental de anticuerpos para COVID-19, basándose en los primeros resultados de un estudio que indicó que el medicamento redujo los síntomas, la cantidad de virus, las hospitalizaciones y las visitas a urgencias para pacientes con coronavirus leve o moderado.
Su fármaco es similar al de Regeneron Pharmaceuticals Inc., que el presidente Donald Trump recibió el viernes. Sus fabricantes dicen que los medicamentos suministran versiones concentradas de anticuerpos específicos para ayudar al sistema inmunológico a eliminar el coronavirus que causa el COVID-19. Se administran como un tratamiento único por vía intravenosa.
Lilly comenzó a producir uno de los dos anticuerpos en su medicamento, apostando a que los estudios en curso demostrarán que funciona.
No está claro si las pruebas se considerarán lo suficientemente sólidas como para que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) otorgue una autorización de uso de emergencia, como ya lo hizo con el medicamento antiviral remdesivir.
ntb