El líder de una secta sexual que atrajo a actrices y a millonarios fue sentenciado el martes a cadena perpetua en Estados Unidos por acusaciones de que obligó a mujeres a convertirse en esclavas sexuales y a marcarse la piel con sus iniciales.
Keith Raniere, el autoproclamado gurú de la secta NXIVM, probablemente fue juzgado por el tribunal en el vecindario Brooklyn de la ciudad de Nueva York.
La sentencia pone fin a años de revelaciones sobre NXIVM, que cobraba miles de dólares para seminarios exclusivos sobre mejoramiento personal en su sede cerca de Albany en el estado de Nueva York, aunque tenía filiales en México y Canadá.
Entre los miembros de la secta destacaban actores de Hollywood y otras celebridades y millonarios, algunos de los cuales se sometían a humillaciones y juraban obediencia a Raniere a cambio de sus enseñanzas sobre cómo lograr la perfección.
En septiembre pasado, la heredera del imperio de destilerías Seagram, Clare Bronfman, fue condenada a 81 meses de prisión, por su relación con la secta sexual.
Fue la primera sentenciada en este caso en el que hay en total seis inculpados y que involucró a varias figuras mexicanas.
ntb