Los 56 millones de habitantes de Inglaterra volverán al confinamiento domiciliario a partir del jueves 5 de noviembre y hasta el 2 de diciembre en un intento de frenar el avance de la pandemia de coronavirus, anunció el sábado el primer ministro británico Boris Johnson.
"Tenemos que ser humildes ante la naturaleza", afirmó en rueda de prensa al anunciar que todos los comercios no esenciales cerrarán y los ingleses no podrán salir de casa salvo para cuestiones esenciales como comprar comida o acudir al médico.
Sin embargo, escuelas y universidades seguirán abiertas.
Bares y restaurantes solo servirán comida para llevar y la gente sólo podrá salir de sus casas para una breve lista de actividades que incluyen hacer ejercicio.
La pandemia se está extendiendo en la mayor parte de Reino Unido, donde la cifra oficial de 46 mi 299 muertos es la más alta de toda Europa.
Esta medidas aplicarán sólo para Inglaterra, pues el resto de países que componen el Reino Unido (Escocia, Gales e Irlanda del Norte) tienen sus propias políticas para combatir el coronavirus.
Con información de Agencias
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