El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sugirió el lunes de madrugada que despedirá al doctor Anthony Fauci tras las elecciones del martes, mientras crecían sus diferencias con el máximo experto del país en enfermedades infecciosas.
Estados Unidos sufre su brote de coronavirus más alarmante desde la primavera.
Durante un mitin en Opa-locka, Florida, Trump expresó su frustración porque el auge de contagios del virus, que ha matado a más de 231 mil estadounidenses en lo que va de año, siga siendo un tema destacado en las noticias, lo que provocó un coro de “Despidan a Fauci” entre sus seguidores.
“No se lo digan a nadie, pero déjenme esperar hasta un poquito después de las elecciones”, dijo Trump a los miles de seguidores poco después de la medianoche del domingo, añadiendo que agradecía su “consejo”.
Las palabras de Trump sobre Fauci a menos de 48 horas del cierre de urnas prácticamente aseguran que su gestión de la pandemia será un tema crucial en los comicios.
Son los comentarios más directos del mandatario sobre que considera seriamente destituir a Fauci. En el pasado había dicho que le preocupaba la reacción política de destituir al popular y respetado experto antes de las elecciones.
En los últimos días, Fauci ha expresado sus críticas más duras hasta la fecha sobre la respuesta de la Casa Blanca al coronavirus y a las afirmaciones públicas de Trump de que el país está “remontando" ante el virus.
El experto ha sido cada vez más explícito sobre que Trump ignoró sus consejos para contener el virus, señalando que no ha hablado con el mandatario en más de un mes. También ha alertado de que el país se dirige a un invierno difícil si no se hace más, y pronto, para frenar la expansión del COVID-19.
En una entrevista con el Washington Post este fin de semana, Fauci advirtió que Estados Unidos tendrá que afrontar “mucho dolor” en las próximas semanas debido al aumento de los casos del coronavirus.
Estados Unidos “no podría estar peor posicionado” para frenar los contagios ante la llegada de los meses más fríos del otoño y el invierno, cuando más gente se congrega en espacios cerrados, añadió. Estados Unidos tendría que dar un “cambio brusco” en sus precauciones de salud pública, afirmó.
Fauci dijo creer que el candidato demócrata a la presidencia, Joe Biden, “se lo toma en serio desde una perspectiva de salud pública”, mientras que Trump “lo ve desde una perspectiva diferente”. Fauci, que forma parte del equipo de trabajo de la Casa Blanca contra el coronavirus, dijo que esa perspectiva prioriza “la economía y reabrir el país”.
El portavoz de la Casa Blanca Judd Deere respondió a las palabras del experto afirmando que Trump siempre ha puesto por delante el bienestar de la gente y dijo que Fauci había decidido “jugar a la política” justo antes de las elecciones del martes. Deere dijo que Fauci “tiene un deber de expresar sus preocupaciones o presionar para un cambio de estrategia”, pero que en lugar de eso había “decidido criticar al presidente en los medios y dar a conocer sus tendencias políticas”.
En los últimos días, Trump ha redoblado sus ataques a Biden por prometer que seguirá las recomendaciones de los científicos para afrontar la pandemia. Trump ha afirmado que su rival “cerraría” de nuevo el país. Biden ha prometido escuchar las advertencias de Fauci y otros profesionales médicos, pero no ha apoyado otra cuarentena nacional.
Otros miembros del equipo de la Casa Blanca contra el coronavirus han hecho declaraciones cada vez más críticas por lo que consideran como un peligroso repunte del virus.