Estes jueves, la ciudad de vieja de Jerusalén amaneció hoy cubierta de blanco tras una noche de intensas nevadas, algo que no sucedía desde 2015 y que tuvo lugar también en otros lugares como Siria, Líbano, Jordania, Israel, Libia, Turquía o incluso áreas del desierto de Arabia Saudí con capas de espesor que en determinados sitios llegaron hasta los 15 centímetros.
En algunos de estos lugares de Oriente Medio hacía años que no se había visto ni siquiera un copo.
La nieve a afectado a la circulación y provocó que se paralizaran las campañas de vacunación contra el COVID-19 en varias regiones. Además, algunas universidades se han visto obligadas a suspender sus clases y se han producido cortes de electricidad y caídas de árboles.
Pese a los problemas ocasionados por la nieve, muchas personas salieron a disfrutar de la nieve y de estos paisajes únicos en medio de la crisis sanitaria o, en algunos lugares de Oriente Medio, humanitaria que están viviendo.
Tras caer los primeros copos de nieve durante la tarde del miércoles, la nevada principal se produjo por la noche y tuvo como resultado el cierre de autopistas, la interrupción del transporte público y una demora en el ingreso a la escuela de los estudiantes de la ciudad.
ntb