El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó de “absolutamente indignante" la represión en Myanmar, luego del día más sangriento desde el golpe de Estado, en el que militares asesinaron a más de 100 personas.
“Es terrible”, respondió durante un viaje a Delaware a los periodistas que buscaban una reacción sobre la situación que se vive en el país asiático, luego de que la milicia asumiera el poder el pasado 1 de febrero tras arrestar a los líderes, entre ellos la consejera Aung San Suu Kyi.
Agregó que son acciones terribles y absolutamente intolerables, pues se ha asesinado a muchas personas de manera innecesaria; esto, tras precisar que se mantiene al pendiente de los hechos, pues recibe informes sobre la violencia en la región; y es que recientemente se reportó que este domingo la milicia disparó contra quienes asistieron a funerales de las víctimas del pasado 27 de marzo.
Sin embargo, no adelantó si su Gobierno impondrá nuevas sanciones, pues pese a la insistencia de los periodistas sólo aseveró “estamos trabajando en eso”.
Apenas la semana pasada el Departamento del Tesoro de EU anunció sanciones contra una corporación militar, mediante la que las Fuerzas Armadas de este país mantienen el control económico.
Con ello, reforzó el congelamiento de recursos que impuso en febrero pasado, para evitar que los militares hagan uso de un fondo de mil millones de dólares e insistió, aquella ocasión, que debían deponer las armas y entregar el poder.
