Este viernes se consolidó uno de los acuerdos internacionales más importantes para ayudar a mitigar los efectos del cambio climático, pues los líderes del G7 acordaron detener el financiamiento internacional de energía producida con carbón.
De acuerdo con el comunicado que los representantes de medio ambiente de estos siete países (Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos) compartieron, se dejará fuera al carbón como una de las fuentes de energía; decisión que también repercute en el uso del petróleo y el gas.
Con esta medida, que será implementada a finales del 2021, se espera reducir las temperaturas globales a 1,5 grados centígrados, meta que también se tiene contemplada en el Acuerdo de París. Sin embargo, al detener la financiación internacional del carbón también se ayudaría a poner un freno a la pérdida de biodiversidad, explicaron.
Además, al ser las siete naciones más importantes del mundo, este acuerdo para dejar de financiar energías producidas con carbón también sería el parteaguas para que otros países adopten la decisión.
Según explicó Svenja Schulze, ministra de Medio Ambiente en Alemania, el acuerdo de este viernes: “Se trata de un paso adelante importante, porque sólo así nosotros, los países industrializados, podemos exigir de manera creíble que otros nos sigan en esa vía”.
En la reunión de dos días que sostuvieron los ministros de medio ambiente en el Reino Unido, también se consideraron otros aspectos importantes en la lucha contra el cambio climático. De acuerdo con el comunicado, estas naciones también se comprometieron a combatir problemas que aquejan a nivel mundial como lo es la deforestación, la sobrepesca y el uso de plásticos.
“Reconocemos que el cambio climático y la salud del medio ambiente natural están intrínsecamente ligados y nos aseguraremos de que las medidas que tomemos maximicen las oportunidades de resolver esta crisis en paralelo”, señalaron en el comunicado.