Ante la “creciente campaña de violencia y represión contra la oposición y la sociedad civil” que se vive en Nicaragua, Human Rights Watch (HRW) urgió a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a elevar la presión sobre el régimen de Daniel Ortega en el país.
“Es necesario que se redoble la presión internacional”, aseveró el director de HRW, José Miguel Vivanco, un día después del arresto del quinto aspirante al Gobierno de Nicaragua, con quien ya suman 17 rivales políticos detenidos, esto como parte de la estrategia implementada por Ortega que “para eliminar la competencia política” y facilitar su reelección.
Tras presentar el informe “Arremetida contra críticos”, Vivanco sostuvo que se requieren acciones inmediatas y contundentes ante la crisis nicaragüense, misma que se intensificó desde el pasado 2 de junio con la aprehensión de Cristiana Chamorro.
Por ello, recomendó aplicar el artículo 99 de la Carta de la ONU para tratar esta situación como “una crisis de proporciones cada vez mayores que involucra graves violaciones a derechos humanos y podría generar inestabilidad en la región”.
HRW busca afianzar las condiciones para garantizar unas elecciones justas para el próximo 7 de noviembre, pues a cinco meses del proceso esta situación tiene “repercusiones alarmantes” en la región.
Sobre todo con el control que ejerce Ortega sobre las fuerzas de seguridad, mismas que se han encargado de arrestar de manera arbitraria a opositores y allanar sus viviendas en las últimas semanas. También exigió detener el acoso a periodistas y defensores de derechos humanos, así como las represalias contra organizaciones.
HRW recordó que la última intervención de la ONU en la materia fue en septiembre de 2018, momento en el que exigió cesar la brutal represión contra manifestantes, disolver grupos armados afines al Gobierno y juzgar a los responsables de la violación a derechos humanos.
Asimismo, comentó que de acuerdo con entrevistas a afectados, defensores de derechos humanos, activistas, periodistas y abogados en Nicaragua, en el país ya hay 124 presos políticos.