Ante la disminución de anticuerpos en personas inmunizadas contra el Covid-19, Johnson & Johnson se sumó al llamado de aplicar otra vacuna, cambiando la estrategia de monodosis.
La farmacéutica indicó que tras estudiar su biológico se confirmó que una nueva inyección, en este caso la segunda, eleva hasta nueve veces la protección contra la enfermedad por la que han fallecido 4.4 millones de personas en el mundo.
En medio del crecimiento de la variante Delta, que provocó nuevos brotes y un alza de hospitalizaciones incluso entre inoculados, J&J realizó pruebas entre personas de 18 a 55 años de edad para evaluar cambios en torno a la inmunidad, siguiendo la ruta marcada por Pfizer y Moderna, y sostuvo que la inmunidad es mayor en comparación con la generada hasta 28 días después de la primera aplicación, intervalo recomendado en otros biológicos.
Y concluyen que el refuerzo se haga entre seis y ocho meses después de la anterior vacuna, lo que respalda la postura de autoridades sanitarias de Estados Unidos, pues el próximo mes inmunizarán a personas que completaron en enero pasado su esquema con Pfizer.
Además, un estudio del King’s College de Londres confirmó que la efectividad de Pfizer y AstraZeneca cae más de 10 por ciento medio año después.