El Departamento de Justicia de Estados Unidos busca opciones para proteger a las mujeres que deseen abortar después de la semana seis de embarazo, luego de la polémica restricción avalada en Texas, aseveró el fiscal general, Merrick Garland.
A una semana de la entrada en vigor de esta ley restrictiva, el fiscal sostuvo que ya analizan la ruta para desafiar la medida, misma que fue respaldada por la Corte al negarse a actuar en contra de ésta.
“(El Departamento) protegería a quienes busquen obtener o proporcionar servicios de salud reproductiva de conformidad con nuestra aplicación penal”, expresó Garland en un comunicado, al recordar que respaldarán a quienes reciban o proporcionen este servicio.
Pues aseveró que aplicarán la ley que data de 1994, pues la legislación texana ni siquiera hace excepciones por casos de violación o incesto.
Con ello, el funcionario refuerza los pronunciamientos del presidente Joe Biden, quien afirmó que su Gobierno defenderá los derechos de las mujeres a interrumpir el embarazo.
Asimismo, el fiscal sostuvo que garantizarán apoyo a las clínicas o centros de aborto ante cualquier intento de ataque, pues no tolerarán ningún tipo de agresión en la materia; mientras activistas exigen revertir la norma, pues consideran que prácticamente elimina el aborto en el estado, ya que la mayoría de las mujeres se entera que está embarazada después de la semana seis, lo que hace imposible que puedan recurrir a un aborto legal.