Un hombre pasó 41 años en la selva, pensando que la guerra de Vietnam todavía no terminaba, y cuando volvió a la ciudad no pasaron ni 10 años antes de que se enfermara de cáncer.
Ho Van Lang se fue a la selva con su padre, huyendo de la guerra; en 2013 fueron a una aldea en busca de ayuda médica para el papá, y se dieron cuenta de que el conflicto ya había terminado. El hijo no se imaginó que moriría en la ciudad por algo como el cáncer.
Luego de comenzar un estilo de vida “civilizado” en la ciudad, comiendo alimentos procesados y tomando bebidas alcohólicas de vez en cuando, el llamado “Tarzán de la vida real” enfermó de cáncer de hígado y, después de 8 años lejos de la selva, murió.
Enferma de cáncer tras cambiar la selva por la ciudad
En la guerra de Vietnam un bombardeo del Ejército de Estados Unidos asesinó a la mitad de la familia de Ho Van Lang, y su papá se lo llevó tan lejos como pudo para salvar sus vidas.
“Estoy triste de verlo irse, pero para mí su muerte también es una liberación porque sé que estuvo sufriendo en los últimos meses”, dijo Álvaro Cerezo, que se hizo amigo de Ho.
El ahora fallecido vivió de frutas y plantando maíz; vestía taparrabos hechos de corteza de árbol y se refugiaba en una choza de madera, sabiendo apenas algunas palabras. En un punto invitó a su amigo a vivir una semana con él en su antigua choza en la jungla, y este último escribió un libro sobre la vida del “inolvidable” Lang.
AHM
