Elena, una anciana de 83 años de edad, se lanzó por el balcón de su casa en un tercer piso en Zaragoza, España, luego de que médicos le negaran si quiera la posibilidad de tramitar la eutanasia.
Luego de años con terribles dolores a causa una luxación de cadera congénita la mujer solicitó el derecho a morir dignamente; pero en medio de trabas burocráticas que impedían poner fin a ese sufrimiento la víctima tomó acción, se arrastró por su cuarto y se lanzó al vacío el pasado 6 de noviembre.
El hecho fue denunciado por la Asociación Derecho a Morir Dignamente que calificó como "boicot" la negativa a la mujer, pues ni siquiera recibieron la documentación que llevó su hija a los doctores, pues Elena ya no podía ni salir de casa.
Incluso, representantes del grupo señalaron que la anciana pasaba gran parte del día en cama y desde hace dos años dejó de jugar cartas y de coser, debido a los severos dolores.
“Emilia no pudo más”
Conocidos de la anciana relataron que ante decenas de obstáculos para que avanzara su solicitud luego de que entrara en vigor la ley en España, simplemente “no pudo más”, pues llevaba al menos cuatro meses tratando desesperadamente de registrar su petición.
Por lo anterior, la asociación Derecho a Morir Dignamente solicitó una reunión con la consejería de Sanidad para exigir poner fin a las irregularidades que impiden que enfermos terminales o con padecimientos severos recurran a esta práctica.
En tanto, la familia de Emilia, quien recuerdan que pese a su edad estaba completamente lúcida, se dijo devastada por orillar a la mujer a esta situación, pues aseguran que cumplió con todos los requisitos, pero simplemente no respondieron a su solicitud.
Y es que explican que la doctora que la atendía y el centro de salud al que acudía se declararon objetores del proceso, por lo que se deslindaron de ofrecer esta alternativa.
Esta situación se da a sólo una semana de la primera eutanasia aprobada en Madrid, a sólo ocho meses de la aprobación de la Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia (LORE).