Un avión con destino a Estados Unidos realizó un aterrizaje de emergencia debido a una falla en el motor; aunque con la medida buscaron proteger a los pasajeros, decenas quedaron varados en Europa.
Los afectados dieron a conocer que se quedaron una segunda noche en la región, luego de que el vuelo 102 de Brussels Airlines aterrizó en Dublín, en lugar de mantener la ruta de Bruselas a Nueva York este viernes y posteriormente trasladados a París.
Explicaron que los pilotos les informaron que el avión presentaba un problema "urgente, pero manejable", mientras se desplazaba hacia el oeste a 37 mil pies sobre el mar Céltico.
Por lo que solicitaron desviarse a Shannon, oeste de Irlanda, pero por instrucciones de la aerolínea, cambiaron la ruta hacia Dublín.
Brussels Airlines no respondió a la solicitud de comentarios de Reuters; sin embargo, los pasajeros confesaron que fueron alojados en hoteles en Dublín antes de ser trasladados a París este sábado.
En la ciudad francesa, muchos de ellos no pudieron tomar vuelos a Nueva York, pues se encontraban llenos a pocos días del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos.
Una joven de 18 años dijo a Reuters que "no tenían nada vegetariano, así que comí pan y una galleta; fue una locura, no sé qué está pasando. No nos dicen nada".
Asimismo expresaron su molestia al quedar varados; un oficial judicial belga, dijo a la agencia que le negaron un vuelo de conexión en París, ya que el avión que traía pasajeros varados desde Dublín también se había retrasado.
"Esto significa que estamos varados en París, mientras que deberíamos estar en Nueva York. Estamos desperdiciando dos de los pocos días de vacaciones que tenemos", declaró.
ANR