La Fiscalía de Washington demandó a los grupos ultraderechistas Proud Boys y Oath Keepers por el asalto al Capitolio el pasado 6 de enero, con el antecedente de la Ley Ku Klux Klan.
Con esta acción el fiscal general de DC, Karl Racine, busca responsabilizar civil y económicamente a individuos y organizaciones, al apuntar directamente contra decenas de líderes a quienes señalan por “conspirar para aterrorizar”, lo que derivó en la insurrección con la que pretendían evitar que Donald Trump dejara la presidencia; cabe destacar que algunos ya enfrentan cargos penales.
Asimismo, refirió que ante casos como los que involucran violencia desatada es necesario sentar un precedente, pues hubo daños sustanciales y se ha demostrado que se trató de un acto planeado para interrumpir la certificación electoral de Joe Biden en Estados Unidos, hecho por el que se acusó al expresidente Trump y hay una investigación en curso contra exintegrantes de su gabinete.
(El objetivo) es responsabilizar a estos mafiosos violentos y grupos de odio violento y obtener cada centavo del daño que podamosKarl Racine, fiscal general de Washington
De acuerdo con Racine, el objetivo es que rindan cuentas por los daños provocados tanto físicos, por la muerte y heridas a oficiales del recinto, y económicos, debido a los destrozos en la calle y oficinas.
En conferencia de prensa, el funcionario indicó que es necesario actuar más allá contra actos “descarados, violentos y mortales”, como el de hace 11 meses.
La demanda se da a conocer un día después de que la Cámara Baja de EU acusara de desacato al exjefe del gabinete de Trump Mark Meadows.
RFH