La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que la vacunación y los respectivos refuerzos no deben ser luz verde para salir a festejar, en referencia a las celebraciones de Navidad y Años Nuevo.
Incluso, el director del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió que el uso de refuerzos anti-Covid, justo un día después de que Israel anunciara que aplicara la cuarta dosis, sólo prolongarán la pandemia, pues las demandas de las potencias representan un desvío de dosis que deberían llegar a países pobres.
Por ello, insistió que las vacunas deben tomarse como una herramienta para reducir el riesgo de muerte y hospitalización por el virus, ahora con la variante Ómicron, y no como una especie de permiso para acudir a eventos masivos o celebraciones grandes.
El doctor lamentó que el 2021 se haya convertido en un año perdido, pues pese a las vacunas ya suman 3.5 millones de muertes a unas semanas de que acabe el año.
Asimismo, criticó la desigualdad y la falta de solidaridad en el reparto de dosis al señalar que la producción total alcanza para que todos los países superaran el 40 por ciento de población inmunizada; sin embargo, por el acaparamiento estos no se logró y sólo la mitad de los Estados miembros llegaron a esta meta en 2021, y en las que aún no llegan a 10 por ciento podrían aparecer más variantes como ocurrió con Ómicron, que fue detectada por primera vez en África, el continente más rezagado en la materia.
Dicho panorama podría prolongarse el próximo año, pues dijo que aún las proyecciones apuntan a que el suministro alcanzará para dar refuerzos a las personas de riesgo, no hay garantías de esto.
Lm.
