Es su segunda hospitalización en 6 meses

Bolsonaro, en espera de definir otra cirugía

El presidente de Brasil reporta en redes su ingreso al hospital tras unas molestias desde el fin de semana; su médico valora si será operado por quinta vez desde el ataque de 2018

El presidente Jair Bolsonaro, desde el hospital, ayer, tras molestias abdominales. Foto: Especial

Horas después de la hospitalización de urgencia del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, su médico cirujano, el doctor Antonio Luiz Macedo, dijo que aún no se define si será sometido a una quinta operación desde que sufrió un apuñalamiento en septiembre de 2018, antes de asumir el cargo.

Según el último reporte oficial del Hospital Nova Star, en donde fue ingresado la madrugada de ayer, pese a que sufre una obstrucción o suboclusión intestinal, el mandatario tuvo una mejoría clínica gracias al tratamiento que incluye una sonda nasogástrica, misma que el propio Bolsonaro reveló al compartir una imagen de él mostrando el pulgar arriba, como signo de mejoría, desde el interior del cuarto de hospital, a través de su cuenta de Twitter.

“Todavía no hay una evaluación definitiva”, se lee en el documento firmado por el cirujano Macedo, quien viajó de emergencia de regreso al país, pues al momento del ingreso hospitalario del ultraderechista él se encontraba de vacaciones en Bahamas, de acuerdo con el reporte de diarios locales.

Se espera que al llegar a la región, posiblemente hasta la madrugada de hoy, realice una revisión a fondo para palpar la región de la molestia. Con ello, identificará cuán grave podría ser para someterlo a una operación que ponga fin a este tipo de molestias que lo aquejan desde hace años, pues según algunos medios este tipo de condición médica puede derivar en necrosis o hasta la perforación de órganos. Y se reiteró que este examen arrojará una mejor conclusión.

El reporte, también firmado por otros especialistas, explica que el jefe de Estado de 66 años de edad evoluciona favorablemente. En las últimas horas disminuyó el dolor intestinal, así como la fiebre, misma por la que se le practicó una prueba de coronavirus, misma que arrojó un resultado negativo, aunque personal médico detalló que se trata de un procedimiento regular para admitir a cualquier persona desde que comenzó la pandemia.

Asimismo, los especialistas indicaron que desde que fue ingresado, Bolsonaro ya dio un paseo corto en los pasillos del centro médico, con lo que se evaluó su umbral del dolor. Además, se indicó que continuará con tratamiento clínico, sin dar detalles sobre en qué momento se dará a conocer otro reporte o si hay un plazo para determinar si quien busca la reelección este año, pues su gestión concluye en diciembre, será sometido otra vez a operación a seis meses de su última hospitalización.

En julio pasado fue llevado de urgencia a causa de un hipo crónico y también dolores abdominales, derivados de la misma agresión que sufrió en campaña cuando era llevado en hombros por simpatizantes, momento en el que tras unos días en observación se determinó que no sería operado nuevamente.

Previo al reporte médico, Bolsonaro —quien también tomó vacaciones este fin de año— detalló en redes sociales que sus molestias comenzaron un día antes desde el almuerzo, por lo que alrededor de las 03:00 horas de ayer fue trasladado al hospital por el peligro de un daño intestinal, según su historial médico, mismo que incluye una cirugía para retirar una bolsa de colostomía.

Debido a que no se cambió el diagnóstico ni hay una definición, el mandatario brasileño continuará en observación y se desconoce el día en que podría recibir el alta médica.

  • El dato: Cinco días estuvo hospitalizado el mandatario en julio pasado por el mismo motivo que lo llevó nuevamente a ser internado, esta ocasión casi de emergencia.