El Primer Ministro británico, Boris Johnson, cometió una serie de “fallos de liderazgo y juicio” al realizar múltiples fiestas durante la pandemia, evadiendo las normas sanitarias por Covid-19 impuestas por su propio gobierno.
El informe de 12 páginas en torno a las fiestas o partygate, que Johnson insiste fueron reuniones de trabajo, concluye que no hay justificación para la conducta del mandatario durante los primeros meses de aislamiento, luego de que medios difundieran fotografías y videos del líder bailando durante encuentros en los que hubo comida y bebidas alcohólicas y no se respetaron la normas, pues no portaban cubrebocas ni respetaron la sana distancia.
Aunque mucha de la evidencia corresponde a mayo, la encargada de la investigación, la secretaria del gabinete, Sue Gray, sostiene que hasta 16 fiestas o eventos irregulares se realizaron en un periodo de hasta 20 meses, por lo que reitera que no hay disculpa para los funcionarios que participaron en estas fiestas, pues a la par de éstas millones de personas se encontraban en confinamiento forzoso.
Algunos de estos eventos no deberían haberse permitido, Otros no debieron desarrollarse en la forma en la que lo hicieronSue Gray<br>Secretaria de la Oficina del Gabinete
Asimismo, la funcionaria apuntó que desde el consumo de alcohol en oficinas como Downing Street son completamente inapropiadas.
En tanto, en la Cámara de los Comunes la ex primera ministra Theresa May, cuestionó la conducta de su sucesor al señalar que es inverosímil que al gobierno no le haya quedado claras las normas que impuso, luego de las revelaciones de múltiples fiestas.
En tanto, Johnson reiteró nuevamente sus disculpas ante el Parlamento y ante el público en general aunque reconoció que no es suficiente seguirse disculpando por las reuniones que, admite, “no se hicieron bien”. Y adelantó que busca cambios en el gobierno como políticas más duras en torno al incumplimiento dictadas por las autoridades, rechazando los llamados y presiones para renunciar, ante la posibilidad de ser multado por las irregularidades.
En tanto, la Policía reportó que tras el escándalo de las fiestas ya ha recibido hasta 300 fotografías y decenas de documentos como parte de la investigación contra Boris y su gabinete.