Admiten aliados que situación avanza rápido

Crisis en Ucrania, en el momento más peligroso

Alertas de inteligencia son cada vez más sombrías, revela el primer ministro británico, Boris Johnson; en EU señalan que Rusia anticipa un ataque simultáneo desde varios frentes y reiteran llamado a salir de esa región lo antes posible ante eventuales operaciones de combate

Despliegue militar ruso, en una base aérea en Bielorrusia.
Despliegue militar ruso, en una base aérea en Bielorrusia. Foto: AP

Pese a las negociaciones entre Rusia y Occidente, los signos de alerta de un ataque en Ucrania siguen al alza, pues el Kremlin no ha frenado sus despliegues y aliados de la nación en riesgo advierten que la situación crítica se encuentra en su fase más peligrosa y no deben quitar la mira de esta zona.

A sólo unas horas de que Rusia y Bielorrusia adelantaran sus ejercicios militares, el primer ministro británico, Boris Johnson, sostuvo que esta crisis ha llegado “probablemente al momento más peligroso”, pues los datos de inteligencia, explicó, son cada vez más sombríos .

Agregó que éstos apuntan a un severo asedio por toda la franja fronteriza, mientras de manera simultánea se adentran grupos especiales en puntos de Bielorrusia, país que colinda con ambas regiones, lo que ven como una estrategia para acechar casi por completo al gobierno que encabeza Volodimir Zelenski, sólo dejando libre el límite del lado oeste.

Durante su visita en la sede de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el líder de Gran Bretaña admitió que la seguridad regional no se había visto tan comprometida en las últimas décadas como ahora, luego de que Rusia aumentara a unos 135 mil los soldados instalados en los límites con Ucrania, por lo que insistió en mantener abierta la vía diplomática como las nuevas reuniones que organizan Francia y Alemania.

Sostuvo que si no lo hacen bien, los gobiernos aliados, todos podrían salir perjudicados, al reconocer que tendría un gran impacto en Europa. Y es que el gobierno ruso cuenta con una ventaja no contabilizada, que son miles de separatistas prorrusos que se encuentran en zonas geoestratégicas aliadas como Donbás, entre otras más.

Éste es, probablemente, el momento más peligroso en la crisis de seguridad más grande en varias décadas...
Boris Johnson, Primer ministro británico

Sus declaraciones fueron secundadas por el secretario general del organismo, Jens Stoltenberg, quien reconoció tras una reunión que, pese a los esfuerzos de Occidente, Rusia parece no tener intenciones de ceder en la materia y refirió que el tiempo de alerta de un posible ataque se está cerrando cada día.

Por lo que instó a Putin a evaluar su posicionamiento al cuestionar a ese gobierno y a sus ciudadanos si creen que es necesario poner en riesgo la vida de la población por una disputa que debe y puede resolverse en la mesa.

Asimismo, coincidieron en que no ingresarán en Ucrania —como aseveró previamente Estados Unidos—, pero ratificaron su total compromiso para reforzar a la nación amenazada y aplicar severas sanciones económicas contra Putin y aliados. Incluso, Johnson explicó que actualmente Ucrania cuenta con suficiente equipo, pero no descartan enviar un nuevo paquete de apoyo o duplicar las fuerzas a disposición de ese territorio en caso de que escale el combate, esto al recordar que varias naciones han enviado efectivos a territorios cercanos como Polonia, Alemania, Rumania, Estonia, Letonia y Lituania.

Por separado, EU y Francia se sumaron al cúmulo de advertencias al insistir en sumar todos los esfuerzos por la desescalada al llamar otra vez a Rusia a detener la situación y dar marcha atrás a la concentración militar en la zona fronteriza.

Gráfico
Gráfico

EU consideró que la situación sigue avanzando muy rápido y la preocupación se eleva, pues se trata de uno de los mayores ejércitos del mundo. Incluso, la inteligencia local alertó que el gobierno de Putin prepara un ataque simultáneo, conocido comúnmente como doble envolvimiento, pues según datos obtenidos por la cadena NBC se prevé que actuará desde varios frentes para neutralizar al país vecino.

De acuerdo con actualizaciones y rastreos de ese sector, el gobierno de Putin ya desplegó a múltiples grupos de élite para abarcar varias rutas a la vez, hasta unas nueve, presuntamente para activarlas e ingresar en un plazo no mayor a 48 horas hasta Kiev.

Posteriormente, el presidente Biden comentó que la crisis podría volverse “loca rápidamente” y, aunque no se trata de una lucha contra una organización terrorista, se enfrentan a fuerzas con alta capacidad en caso de que Rusia opte por una invasión, por lo que la población debe abandonar Ucrania de inmediato.

Su gobierno emitió otra vez una alerta de viaje al recordar que el nivel de riesgo alcanzó el 4 y no se recomienda acudir o permanecer en Ucrania, haciendo énfasis en puntos críticos como Crimea —anexionada por Rusia en 2014—, Donetsk, Lugansk y zonas aledañas, pues en caso de una guerra ven nula capacidad para lleva apoyo a esas zonas.

En un comunicado, sostiene que hay un alto riesgo de que se registren operaciones de combate, así como “un potencial de acción militar significativa”, pues reconocen que sigue escalando de manera veloz y se trata de uno de los principales ejércitos entre las potencias.

En tanto, el ministro de Exteriores galo, Jean-Yves Le Drian, pidió mantener los ojos bien abiertos ante una pronta escalada; mientras que el secretario de Estado de EU, Antony Blinken, aseveró a sus aliados que siguen pendientes las 24 horas, por lo que no descartan alcanzar un acuerdo mientras esperan respuesta a una propuesta enviada a Rusia.

En esta escalada el país amenazado acusó que los ejercicios navales rusos en el mar Negro no son más que un pretexto para obstruir la zona.

El ministro de Exteriores ucraniano, Oleg Nikolenko, señaló que la movilización de 140 barcos y más de 60 aviones rusos en la región tiene dos componentes: imposibilitar la navegación a otros en esas aguas y mantener la amenaza contra su gobierno; ante lo que el Kremlin respondió que sus maniobras, terrestres, marítimas y aéreas, son acorde al derecho internacional.

  • El dato: El gobierno británico ve un freno ruso a las negociaciones, luego de que el canciller ruso, Serguéi Lavrov, asegurara que Occidente sólo alarga los diálogos sordos.