Cientos de policías retomaron el control de las calles alrededor de los edificios del Parlamento en Ottawa, Canadá, pues pusieron fin a las protestas de quienes estaban en contra de las restricciones por COVID-19.
De esta manera, los elementos se encargaron de barrer las calles de la capital después de tres semanas de disturbios. Los manifestantes se retiraron de la operación policial “más grande del país”, ya que los agentes arrestaron y expulsaron a las personas, además de remolcar sus camiones.
No obstante, el jefe interino de la policía capitalina, Steve Bell, comunicó que protestas más pequeñas continuaron, pero que la ocupación “ilegal” está dada por terminada, aunque continuarán sus labores.
No iremos a ninguna parte hasta que recuperen las callesSteve Bell
Tom Marrazo, uno de los organizadores, comentó que algunos manifestantes prometieron permanecer en las calles, pero varios decidieron “retirarse pacíficamente”.
Para las operaciones de limpieza, se trajo a la policía de todo el país para trabajar, de acuerdo con Bell, quien también recordó que 170 personas fueron arrestadas entre el viernes y el sábado.
Asimismo, agregó que iniciaron múltiples investigaciones debido a que existió incautación de armas.
Con información de AP
MAEP