Mientras el diálogo entre Ucrania y Rusia se da una pausa, el mundo eleva las alertas por el riesgo de que el conflicto escale a una guerra nuclear y que aliados de Vladimir Putin, como China, le brinden apoyo económico o militar.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, advirtió que una guerra nuclear, aunque escalofriante, es latente ante los bombardeos, proceso en el que insiste habrá “sólo perdedores”.
Tras evaluar la crisis del país invadido, refirió que, aunque hace semanas era impensable la guerra, tras 19 días el factor nuclear “vuelve a ser una posibilidad”, mensaje que coincide con el nuevo corte de energía en la planta de Chernobyl.
Por ello, llamó a líderes a preservar la seguridad y la protección de las instalaciones con reactores al recordar que la invasión ya alcanzó “proporciones aterradoras” y urgió a respaldar al gobierno de Volodimir Zelenski para garantizar alimentos, medicinas e insumos ante “el horror desatado”, mientras el mundo vive una inflación récord, tasas de interés al alza y otros efectos en busca de salir de la pandemia de Covid-19.
Y otra alerta surgió desde España en donde el presidente, Pedro Sánchez, exigió “pararle los pies” a Putin al advertir que con esta “escalada bélica puede venir lo irreversible”, pues con estas tensiones no se sabe cuál es el país que sigue en esta embestida.
Por separado, Gran Bretaña reiteró que Rusia podría estar preparando una maniobra de bandera falsa con armas químicas o biológicas, luego de acusar el uso de bombas de racimo en su contra, hecho del que no presentó pruebas. El Ministerio de Defensa británico indicó que el plan podría ser usarlas o responsabilizar a Ucrania de un ataque para justificar nuevos bombardeos en la región que sigue resistiendo desde varios frentes.
Con este panorama, Estados Unidos mantiene la mira puesta en China al reconocer severas preocupaciones de que dé asistencia al Kremlin.
Pese a que las naciones asiáticas desmintieron este supuesto acercamiento y el vocero de Exteriores chino, Zhao Lijian, refirió que no buscan “añadir combustible” al conflicto, el gobierno de Joe Biden, a través del asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, reiteró que sancionarán a cualquiera que ayude a Putin a evadir las restricciones mundiales.
“He comunicado (a Beijing) que no nos quedaremos de brazos cruzados y permitir que cualquier país compense a Rusia por sus pérdidas”, externó el enviado de EU a la delegación asiática con la que dialogó por siete horas, pues considera que su participación en esta crisis puede dañar la relación con Occidente.
Al respecto, CNN reveló que la solicitud incluye paquetes alimentarios no perecederos o preenvasados y hasta drones, sin especificar el uso que les darían; ello confirmaría los datos de que los soldados invasores se quedan sin suministros y han asaltado tiendas.
Horas después, el Kremlin prohibió la exportación de cereales, como trigo, maíz y cebada, así como azúcar a EU y la Unión Europea (UE) —principales verdugos económicos— para asegurar insumos ante las restricciones que podrían vulnerar “el mercado interno de alimentos”.
En tanto, la negociación entre las naciones en disputa entró en “receso técnico”, de acuerdo con el asesor ucraniano Mijail Podoliak, pero con la confianza de retomar hoy el diálogo con miras a un cese al fuego, pese a los reiterados fracasos en la definición de corredores humanitarios, proceso en el que se mantiene como mediador el mandatario francés, Emmanuel Macron, quien aseguró que tendrá otra llamada con Putin.
SALE CARAVANA DE 160 AUTOS
Al menos 160 vehículos con cientos de refugiados escaparon de Mariupol a través de un corredor hacia Zaporiyia.
Sin un plazo estimado al destino, debido a interrupciones por controles rusos, la caravana que se nutrió en sólo dos horas avanzó sin asedio, en medio de las dudas y temores por la violación del acuerdo de las tropas rusas.
Y es que siguen los ataques al disparar contra civiles en Mariupol, donde fallecieron una madre y su bebé a unos días de que ella resultara lesionada por el bombardeo a un hospital. Asimismo, se detalló que en Kiev resultó herido otro periodista, Benjamin Hall, cuando cubría las salidas desde la capital.
Este sector se convierte en el primer grupo masivo que sale de la región, mientras Rusia insiste en atacar Kiev, Donetsk, Járkov, Rivne y Jerson donde las fuerzas enemigas destruyeron edificios de departamentos y mataron a casi una decena de personas ayer.
En respuesta, Rusia acusó a Ucrania de asesinar a 20 civiles en Donbás, mientras crece el repudio en el país, pues el excanciller Igor Ivanov demandó negociar las diferencias en vez de pelear al recordar que este hecho dejará consecuencias con el paso del tiempo.
Mientras que Marina Ovsyannikova, editora del Canal 1 ruso, retó al gobierno al protestar en vivo en la televisora con un letrero de “no a la guerra” al culpar a los medios de respaldar la propaganda del Kremlin, al mentirle a la población sobre una operación que en realidad es un crimen. Tras la afrenta, el canal cortó la transmisión y la mujer fue arrestada por “desacreditar a las fuerzas armadas rusas”, hecho por el que enfrentaría 15 años de prisión por contradecir al gobierno.
- El dato: La Corte Internacional de Justicia adelantó que mañana definirá y dará a conocer si habrá medidas cautelares contra Rusia por la denuncia de Ucrania por “crímenes de guerra”.