El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó este jueves liberar un millón de barriles diarios de la reserva estratégica de petróleo durante seis meses. El objetivo es controlar el aumento de los precios de la energía, derivados de las sanciones impuestas contra Rusia por su invasión a Ucrania.
El mandatario estadounidense explicó que para reducir los precios de la gasolina se necesita aumentar el suministro de petróleo en estos momentos, ya que se trata de un “momento importante y de peligro para el mundo y de penuria para las familias estadounidenses”.
De acuerdo con el gobierno, la medida no tiene precedentes, pues nunca se había liberado petróleo a un ritmo de un millón de barriles al día. Ante ello, Biden espera que su decisión ayude a poner más crudo en el mercado energético hasta final de este año, cuando la producción interna de EU haya acrecentado; además, se coordina con sus aliados en todo el mundo.
La Casa Blanca caracterizó la liberación del petróleo como un puente hasta que incremente la producción de las empresas nacionales. Por su parte, funcionarios del gobierno calculan que la producción crecerá, en promedio, un millón de barriles diarios este año y 700.000 barriles adicionales diarios en 2023.
Energía más limpia
Joe Biden expuso que sentará una nueva base para una independencia energética estadounidense duradera a través de la energía limpia.
Asimismo, el presidente quiere que el Congreso imponga sanciones financieras a empresas de petróleo y gas que arriendan tierras públicas, pero no producen.
Invocará la Ley de Producción para la Defensa para alentar la extracción de minerales que son cruciales para las baterías de los vehículos eléctricos, como parte de su campaña para dirigirse hacia fuentes de energía más limpias y reducir el uso de combustibles fósiles.
De la misma forma, pidió a las empresas realizar inversiones para acelerar la adopción de fuentes de energía más ecológicas.
MAEP