La policía en California está buscando a por lo menos un sospechoso tras un ataque a tiros en Sacramento la madrugada del domingo que dejó seis muertos y 10 heridos.
La jefa policial de Sacramento, Kathy Lester, informó en conferencia de prensa que se patrullaba la zona alrededor de las 02:00 horas cuando estallaron los disparos.
Al llegar al lugar, los agentes vieron a una gran multitud en la calle y seis personas muertas. Otras 10 acudieron por su cuenta al hospital o fueron llevadas allí. No se dio detalles sobre su condición.
Las autoridades desconocieron si hubo uno o más atacantes, y pidieron a la comunidad ayuda para identificar a los responsables.
"Esta es una escena muy compleja y complicada".Kathy Lester
Lester hizo un llamado al público por si alguien vio el suceso o tiene grabaciones que puedan ser útiles, para que contacten a la policía.
El alcalde de Sacramento, Darrell Steinberg, escribió en Twitter: "No hay palabras para expresar mi asombro y tristeza esta mañana. La cantidad de muertos y heridos es difícil de comprender. Estamos esperando más información sobre qué exactamente ocurrió en este suceso tan trágico".
Videos colocados en Twitter mostraron a gente correr por la calle mientras se escucha el estruendo de los disparos. También se vio a ambulancias llegar al lugar.
La Policía de Sacramento dio escasos detalles pero señaló en su cuenta de Twitter que "habrá gran presencia policial en el lugar y los hechos están en desarrollo".
Además, pidió a la ciudadanía mantenerse alejada del lugar, donde hay varios restaurantes y bares, y que está cerca del Golden One Center, donde juega el equipo de basquetbol Kings de Sacramento.
Berry Accius, un activista comunitario, relató que acudió al lugar poco después del tiroteo.
"Lo primero que vi fue a las víctimas. Una niña toda cubierta de sangre y otra niña que le quitaba los vidrios rotos de encima, otra niña que gritaba 'mataron a mi hermana'. Una madre corría gritando, '¿dónde está mi hijo? ¿Le han disparado a mi hijo?'".Berry Accius
"Todo era conmoción, trauma, una cantidad de cosas que, sabes, uno no quiere ver", añadió.
Kay Harris, de 32 años, dijo que estaba durmiendo cuando un familiar la llamó para decirle que quizá su hermano murió; ella pensaba que estaba en London, un club en el número 1009 de la Calle 10.
Harris resaltó que había estado varias veces en el club, al que describió como un lugar "donde va la gente joven".
La policía acordonó la zona alrededor del club con cinta amarilla.
Harris se posó la mañana alrededor del local, esperando información. “Este fue un acto violento, sin sentido”, expresó.
KEFS
