La Corte de Apelaciones de Texas suspendió la ejecución de Melissa Lucio, una madre acusada del homicidio de su hija de dos años, dos días antes de que la mujer de 53 años recibiera la inyección letal.
En medio de las interrogantes sobre su culpabilidad en torno al asesinato de la pequeña Mariah, la corte retrasó la aplicación de esta medida en espera de revisar a detalle las pruebas en torno al crimen ocurrido en 2007 así como examinar nueva evidencia que aportaría información relevante.
Al conocer la medida que abre la puerta a que se demuestre su inocencia, Lucio agradeció a Dios por su vida, en espera del resultado de la revisión de evidencia que no estaba disponible cuando fue sentenciada.
Melissa Lucio, de origen mexicano y quien sería la primera latina en ser ejecutada en Texas, se encuentra en el llamado corredor de la muerte desde 2008 luego de ser detenida por el fallecimiento de Mariah a quien presuntamente mató de un golpe fatal en la cabeza.
Su historia se ha conocido a través de la organización Innocence Project, que ha difundido información sobre la mujer que insiste en inocente, pues no cometió el crimen que le imputa, pues ella amaba a su pequeña hija. Incluso se detalló que Lucio fue forzada a firmar una confesión del presunto crimen.
Innocence Project confirmó en redes sociales, casi 48 horas antes de que se llevara a cabo la ejecución, que la medida fue suspendida lo que abre la puerta a que se demuestre su inocencia.
avc
